cubaencuentro.com cuba encuentro
| Cuba

Torre de la Libertad, Miami Dade College

Donan la Torre de la Libertad al Miami Dade College

El símbolo del exilio cubano será utilizado como instalación educativa y museo.

Enviar Imprimir

AFP/ Miami. El edificio Torre de la Libertad, símbolo del exilio cubano en Florida, fue donado al Miami Dade College (MDC), entidad universitaria local, por el promotor de bienes raíces que la había comprado, en medio de una polémica por la anunciada ubicación cercana de un gran rascacielos que podría opacarla.

Según el MDC, la torre será utilizada de ahora en adelante como instalación educativa y museo, dedicado a su pasado como sede del otrora principal diario de la ciudad y como centro de ayuda a los inmigrantes cubanos.

"Desde el principio nuestro propósito fue restaurar la Torre de la Libertad y crear un monumento viviente, bello y útil que ayudara a nuestros ciudadanos a conocer la historia de Miami", dijo en un comunicado Pedro Martín, director ejecutivo de Terra Group, una empresa promotora de proyectos de bienes raíces que adquirió el edificio este año por 26 millones de dólares.

En la Torre se creará un museo similar al que hay en la histórica Ellis Island de Nueva York, puerta de entrada a Estados Unidos de miles de inmigrantes a principios del siglo pasado.

La Torre de la Libertad fue construida en 1925 para albergar las oficinas del desaparecido Miami News & Metropolis, a semejanza de la Giralda de Sevilla, España.

El diario cerró a finales de los cincuenta y, a partir de la llegada al poder de Fidel Castro, el gobierno estadounidense utilizó el edificio para procesar a los miles de inmigrantes que llegaron a Florida procedentes de Cuba.

A finales de los noventa, la Torre fue comprado por Jorge Mas Canosa, fundador de la Fundación Nacional Cubano-Americana, que quería convertirla en museo y la restauró. Su familia la vendió posteriormente a Terra.

El edificio, que fue utilizado para los funerales de la cantante cubana Celia Cruz en julio de 2003, está en el medio de una polémica porque Terra pretende construir detrás un gigantesco rascacielos de 62 pisos que prácticamente la haría desaparecer entre la mole.