Actualizado: 17/04/2024 1:24
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Homenaje al escritor Eliseo Alberto en el Palacio de Bellas Artes de Ciudad México

El encuentro incluyó la presentación de sus dos libros más recientes, 'Una noche dentro de una noche' y la novela 'Esther en alguna parte'.

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El narrador cubano Eliseo Alberto (Lichi) recibió un homenaje este domingo en un acto que convocó a cerca de 500 personas en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, en Ciudad México, reportó Notimex.

El encuentro incluyó la presentación de sus dos libros más recientes, Una noche dentro de una noche (Cal y Arena) y la novela Esther en alguna parte (Espasa Calpe), De este último, leyó un fragmento la actriz mexicana Patricia Llaca.

De "libro imprescindible para el periodismo mexicano", calificó el periodista cubano Rubén Cortés Una noche dentro de una noche, que reúne 75 entregas de la columna periodística La Rueda dentada, publicada por Lichi en el diario mexicano La Crónica.

El periodista se refirió al valor de Eliseo Alberto como periodista "contador de historias, especie que se ve bastante poco en México, donde el periodismo prefiere dedicarse más al qué, a la noticia dura, que al cómo, o sea, la narración y la argumentación".

"Con Lichi uno entra en la eterna polémica de cuál es la diferencia entre periodismo y literatura, pero aquí y ahora se puede afirmar que es ninguna", añadió Cortés.

En tanto, el escritor mexicano Jorge F. Hernández definió la novela Esther en alguna parte como una "obra perfecta", y agregó que la obra de Eliseo Alberto está cargada de nostalgia y melancolía de una persona que se siente extranjera, y que ha sido exiliada de su país natal, donde actualmente está prohibido.

Además, dijo, en su obra se observa esa añoranza de su terruño y sus novelas tienen una carga esencialmente triste que recuerda la nostalgia del Malecón de La Habana, los rincones de la Habana Vieja o el barrio del Vedado.

Por su parte, la escritora Ángeles Mastreta entrevistó en público al escritor. Le preguntó sobre su madre y su tía, personajes claves en su formación, a lo que el autor respondió con anécdotas familiares.

Lichi mencionó que entre su familia, repleta de músicos, solían comentar: "los que no sirvan para la música que se dediquen a la literatura". Asimismo, narró historias de su casa en Cuba, de cuando se hacían tertulias que reunían a sus padres, Eliseo Diego y Bella García Marruz, y a sus tíos, los poetas Fina García Marruz y Cintio Vitier.

"Mis inicios fueron en la poesía, con poemas que ahora veo muy malos, eran poemas de un muchacho enamorado, pero se acabó el amor y dejé de escribirlos", además de que con la novela "no podía compararse con los versos que ya había escrito mi padre (Eliseo Diego)", afirmó.

"Yo no puedo escribir si no soy feliz. Mis libros son esencialmente tristes, seguramente por el exilio y esas cosas, pero soy un amoroso y mis amores no me dejan ser infeliz, esos hombres y mujeres de oro que no son un ejército, sino más bien una cofradía".

Al hablar de México, opinó que es "una tierra generosa para los escritores. En ningún lugar de América Latina o España han vivido bajo el mismo cielo tantos escritores como Tito Monterroso, Álvaro Mutis, Gabriel García Márquez o Fernando Vallejo".

Mastreta, quien lo describió como un hombre de "ojos tristes pero con alma alegre", dijo que "reconocer a Lichi como un maestro, es un privilegio. Verlo vivir, gozar y padecer el amor".

Uno de los amigos del escritor comentó también que el autor de Informe contra mi mismo tiene "bondad en el corazón y dulzura en el trato". Así, otro afirmó que el autor de La eternidad por fin comienza un lunes es un experto en la nostalgia.

Para concluir, Lichi y Patricia Llaca, en un mano a mano, leyeron fragmentos de la última novela que el cubano está por publicar, El retablo del conde Eros, basada en el espíritu de su hermano fallecido en México.

Licenciado en Periodismo en la Universidad de La Habana, Eliseo Alberto (Arroyo Naranjo, 1951) fue ganador de la primera edición del Premio Internacional Alfaguara de Novela en 1998 con Caracol Beach.

Entre otros títulos, ha publicado el poemario Un instante en cada cosa, la novela La eternidad por fin comienza un lunes (1992) y el libro de memorias Informe contra mí mismo (Alfaguara, 1997), Premio Gabino Palma.

Además, ha escrito guiones de cine y televisión, como el de Guantanamera, dirigida por Tomás Gutiérrez Alea, y su actividad docente abarca clases y talleres en la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños, Cuba, en el Centro de Capacitación Cinematográfica de México y en el Sudance Institute.