Actualizado: 07/05/2024 1:47
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Lula y Bush discutirán sobre la apertura del mercado de EE UU al etanol brasileño

Brasil reclama a Washington que retire los aranceles sobre la importación de etanol.

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El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, dijo el lunes que discutirá "a fondo" esta semana con el mandatario estadounidense, George W. Bush, sobre la posibilidad de avanzar hacia un acuerdo global de comercio y la apertura del mercado norteamericano al etanol brasileño.

En su programa semanal de radio Desayuno con el Presidente, Lula afirmó que pretende dirigir la agenda con Bush hacia dos grandes temas comerciales: las negociaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y los biocombustibles, para los que Brasil reclama que Estados Unidos retire los aranceles que cobra a la importación de etanol.

"Si encontramos soluciones para el acuerdo de la OMC y para el biocombustible, ya estaremos haciendo un bien extraordinario a la humanidad", dijo Lula.

Brasil lidera el llamado G-20, integrado por países en desarrollo que se han convertido en el principal grupo de presión frente a Europa y Estados Unidos y reclaman más acceso de sus productos agrícolas a esos mercados. Lula insistió en los reclamos del G-20, pero también indicó que los países en desarrollo están "dispuestos a hacer su deber" de flexibilizar sus normas para productos industriales y servicios.

"Esa es una conversación que pretendo tener a fondo con el presidente Bush", dijo.

En cuanto a los biocombustibles el brasileño criticó los aranceles estadounidenses: "No tiene sentido la alta tasa que Estados Unidos impone al etanol brasileño", dijo y confirmó que pretende debatir ese tema con Bush.

Brasil y Estados Unidos producen alrededor del 70% del etanol mundial, un combustible que en el país sudamericano mueve buena parte del parque automotriz.

Brasil exporta a Estados Unidos parte de su etanol, pero sus productores protestan por las tasas.

Según Reuters, actualmente, el arancel estadounidense a las importaciones del combustible se ubica en 0,54 dólares por galón.

Los productores estadounidenses están presionando a Bush para que no modifique esas tasas. Sin embargo, el presidente estadounidense enfrenta otras presiones contrarias, debido al encarecimiento del maíz, que es la materia prima del etanol de Estados Unidos.

Los biocombustibles se han convertido en el tema estrella de la cumbre Bush-Lula, prevista para el viernes en la metrópoli industrial de Sao Paulo.

Pero analistas políticos y de energía citados por la agencia AP han advertido que es poco probable que cualquier tipo de acuerdo alcanzado entre Brasil y Estados Unidos tenga efectos a corto plazo. Incluso el pacto mismo podría terminar, en gran medida, como algo meramente simbólico, debido a la resistencia de Washington a abordar el tema de los aranceles.

Lula destacó la importancia de los llamados biocombustibles para reducir la contaminación atmosférica y la dependencia del petróleo, y para producir empleos e inversiones en otros países que podrían adoptar esa tecnología.

"Debemos convencer al mundo de que la producción de combustibles renovables, generadores de empleos, favorecerá no sólo a la humanidad en general, sino que puede posibilitar que los países ricos puedan tener proyectos de inversión en la agricultura en países menos desarrollados, sobre todo en países de África, Centroamérica, que tendrán un crecimiento económico, una generación de empleo, una distribución de renta", concluyó Lula.