Confirmado: Raúl Martínez versus Lincoln Díaz-Balart en la carrera hacia el Congreso de EE UU

Raúl Martínez le disputará el cargo a Lincoln Díaz-Balart

"Raúl Martínez, ex alcalde de Hialeah, anunciará esta mañana de manera oficial su candidatura al cargo de representante federal que ocupa el congresista republicano Lincoln Díaz-Balart. Poniendo fin a una ola de especulaciones en las últimas semanas, Martínez, un peso pesado del Partido Demócrata, confirmó la postulación en declaraciones a El Nuevo Herald. 'Ya está decidido y mañana [hoy] por la mañana voy a declarar mi intención de ser candidato por el asiento correspondiente al distrito 21', dijo Martínez en una conversación telefónica".

"El anuncio se hará en la Alcaldía de Hialeah, donde Martínez comenzó su carrera política como concejal en 1977. Cuatro años después se convirtió en el alcalde más joven del país y en el primer cubanoamericano en ocupar un cargo de esa responsabilidad. Martínez fue alcalde hasta el 2005 y ganó nueve elecciones consecutivas. En declaraciones al programa A Mano Limpia del Canal 41, Martínez reveló que contará con el respaldo del ex senador demócrata Bob Graham, quien lo asesorará sobre la política en Washington".

"El enfrentamiento político de Martínez y Díaz-Balart, que se dirimirá en noviembre próximo, será una de las contiendas electorales más electrizantes del sur de la Florida pues ambos tienen fuertes personalidades y su rivalidad política es pública. Díaz-Balart y Martínez difieren prácticamente en todo. Desde política interna hasta detalles sobre las relaciones con Cuba. Esta será la primera postulación de Martínez al escaño y la novena de Díaz-Balart, quien ha ganado abrumadoramente desde que se postuló por primera vez en 1992…".

El Nuevo Herald (Miami), EE UU
22 de enero de 2008

Elecciones a la cubana, elecciones cantadas

"El pasado domingo 20 de enero se celebraron en Cuba elecciones parlamentarias nacionales y regionales con el ánimo de elegir a las distintas asambleas del Poder Popular. Como en la época de las Cortes de Cádiz, estos comicios son un paso más de una cadena de elecciones indirectas sucesivas, con el objetivo final de que el parlamento electo pueda designar, el 24 de febrero, al próximo presidente del Consejo de Estado. A diferencia de lo que ocurre en la mayor parte de América Latina donde es el sufragio directo de los ciudadanos el que elige a sus mandatarios, el sistema electoral cubano es un complejo sistema de elecciones indirectas que permite un mayor y mejor control de la voluntad ciudadana por parte del aparato gobernante".

"…Por lo demás, se trata de unas elecciones sin misterio y casi sin interrogantes. Pese a todo, la prensa internacional se ocupó del tema mucho más que en otras ocasiones. Y es que de no mediar el morbo en torno a la sucesión de Castro, y a su deteriorado estado de salud, estas elecciones, como ocurrió con todas las anteriores, hubieran pasado prácticamente desapercibidas para la opinión pública mundial (…) De forma reiterada, la propaganda oficial señala que estamos frente a un modelo de democracia. Que Cuba es el lugar del mundo donde la democracia participativa se ha desarrollado más y que el pueblo se puede expresar sin ningún tipo de intermediaciones. Por eso, partiendo de la base de la igualdad de oportunidades, en Cuba no hay campaña electoral (…) De este modo, sin embargo, se elimina cualquier debate de ideas, ya que no hay competencia electoral".

"…En esta oportunidad, para elegir a los 614 diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular había 614 candidatos... Si se quisiera llegar hasta el fondo en la igualdad de oportunidades se debería hacer lo que en la Grecia clásica, cuando los representantes del pueblo eran elegidos por sorteo, lo que en la jerga hispana se conoció posteriormente como insaculación, un método que estaba muy de moda en los cabildos coloniales y que en parte siguió vigente después de 1808. Con todo, y más allá de la transparencia prometida, el escrutinio se demora mucho más de lo asumible como correcto en otros países…".

Carlos Malamud, Infolatam, España
22 de enero de 2008

El 'Espartaco' del Bolshói se impone en París

"La Ópera Garnier en pie. Emociones a flor de piel y una ovación ante telón de 10 minutos. Fue una noche memorable para el ballet, pero en particular para dos personas en las antípodas: la joven estrella del gran ballet actual, el cubano Carlos Acosta, y por otra parte el octogenario coreógrafo ruso Yuri Grigorovich…".

"…Por razones diversas Acosta y Grigorovich volvían a tocar triunfalmente el techo de sus propias vidas artísticas; los éxitos de hoy convertían en laureles los sinsabores de antaño. Al primer bailarín cubano hoy mucha gente le califica como el nuevo Nureyev, y aunque no es aquí la ocasión para entrar en esas disquisiciones hay que decir que el empuje, energía y voluntad expositiva de este muchacho salido de un barrio pobre de La Habana y cuya historia sigue sonando a cuento de hadas, es extraordinaria. Cada uno en su tiempo, cada uno en su cuerda, son hitos de diversa índole y carácter de lo que es y será siempre la historia del gran ballet y lo que sí les espeja probablemente es la capacidad prismática y de ataque del cubano a la hora de bailar".

"…No es exagerado decir que Carlos Acosta borda Espartaco a partir de crearlo, de inventarlo en particular, virtuosismos aparte, pues siendo negro y robusto, pero no apolíneo (en cuanto al canon de Blasis), lo hace explosivamente dinámico, su versión del esclavo opta por alejarse inteligentemente de sus precedentes honorables, históricos y canónicos como Mijaíl Lavroski y Vladímir Vassiliev. Con Acosta puede hablarse incluso de una interiorización del dibujo coreútico hacia la creación de un héroe moderno…".

Roger Salas, El País, España
21 de enero de 2008

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