Adelantados y rezagados
José Ariel Contreras, 'El Duque' Hernández y el torpedero Yunieski Betancourt son los cubanos con mejor desempeño en la presente temporada.
El lanzador José Ariel Contreras y el torpedero Yunieski Betancourt en la Liga Americana, y Orlando El Duque Hernández en la Nacional, son los cubanos procedentes de las Series Nacionales que mejor desempeño han mostrado en la actual contienda de Grandes Ligas. El certamen anual que concentra a los mejores peloteros del mundo, ya está en el tercio final del largo calendario de 162 juegos y 6 meses de competencia.
Contreras, una de las estrellas del Chicago Medias Blancas —monarca en 2005—, presenta un buen balance de 10 victorias con 4 derrotas, excelente efectividad de 3,75 y es uno de los baluartes del mentor Ozzie Guillén para la recta final, donde espera ocupar una de las cuatro posiciones que le permitirán asistir a la competencia de postemporada.
Betancourt, short stop regular de los Marineros de Seattle, se ha ganado la admiración de todos por su juego seguro alrededor del segundo saco y el alza que últimamente ha experimentado en el bateo, que lo han consolidado como uno de los mejores del joven circuito, a pesar de llevar año y medio en ese béisbol. El villaclareño, que hasta la mitad de la campaña bateaba para 288, en julio consiguió 27 hits en 78 oportunidades, lo que le permitió ascender a los privilegiados 300 puntos de average.
En cuanto a El Duque, comenzó en abril con el Arizona, donde no pudo mostrar su indudable calidad. Tan pobre fue su trabajo en los dos primeros meses, que andaba con 2 triunfos, 4 reveses y 6.11 en carreras limpias. Fue traspasado a los Mets y ahora, con los líderes del viejo circuito, tiene 5 ganados, 4 perdidos y en sus últimas salidas ha disertado desde la lomita. Quizás se deba a que el manager Willie Randolph lo utiliza con entre 6 y 7 días de descanso en los que ha trabajado hasta 8 innings por actuación, algo que no pueden hacer la mayoría de los abridores del torneo. El elenco de la gran manzana es candidato seguro para los play-offs y El Duque debe ser uno de los protagonistas principales.
Liván, Kendry y Danys Báez
Inesperadamente y después de actuar el pasado domingo en excelente forma, Liván Hernández, primer lanzador del Washington, fue canjeado este lunes a los Diamondbacks de Arizona a cambio de los prospectos Garrett Mock y Matt Chico. Para el Arizona, conjunto necesitado de brazos fuertes en esta etapa del torneo, el cubano le cae como una bendición debido a su capacidad para trabajar consistentemente, aunque no ha estado en su mejor campaña. Liván, con un brazo de hierro durante 11 temporadas seguidas, fue bateado con soltura hasta finales de junio, pero en sus últimas 8 salidas salió airoso 4 veces y en las restantes no tuvo decisiones. Ahora tiene 9 éxitos con 8 fracasos y promedio ineficiente de 5.48.
Los dos restantes peloteros que militaron en las contiendas de la Isla y que están en la gran carpa, Danys Báez y Kendry Morales, no han mostrado toda la clase que de ellos se esperaba. Báez, cerrador estupendo con Cleveland por 3 años y 2 más con el Tampa Bay, pasó a los Dodgers de Los Ángeles para sustituir al inmenso Eric Gagne —lesionado por toda la justa—. Pero bajó su rendimiento y se "dejó quitar el puesto" por el japonés Takashi Saito, un veterano lanzador del noveno inning en las contiendas niponas y debutante en Estados Unidos, que se abrió paso a base de ponchar a rivales, como solía hacer el canadiense Gagne.
El vueltabajero, un notable ponchador en lides anteriores, en 49 entradas solamente había retirado por la vía de lo strikes a 31 bateadores, pero el nipón, en la misma cantidad de episodios, dejó con la carabina al hombro a 71. Como si esto fuera poco, Saito trabaja para un porcentaje de 2.38 y el vueltabajero anda por los 4.10. Todo ello sirvió para que el Atlanta, escaso de pitchers, lo adquiriera para su frágil equipo de relevistas.
El equipo Ángeles de Los Ángeles, un elenco netamente bateador de la Liga Americana, le abrió las puertas a Kendry Morales con la responsabilidad de ser quinto o sexto bate, y para que cubriera la primera almohada. Pero en su primera incursión en la pelota élite, el impactante novato no ha podido lograr con el madero lo necesario. Los ex Angelinos de Anaheim alternaron en la posición a otros dos jóvenes y el que mejor encajó es Robb Quinlan, quien tiene promedio de 303 y al parecer se hará dueño del mascotín.
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