Efemérides de la Contrarrevolución Cubana
Rodríguez y Dueñas acreditan que el mercado es implacable, pero al menos encierra la oportunidad y regula mucho mejor el despliegue del talento que cualquier mecanismo del socialismo burocrático
El 31 de octubre de 2003, The Miami Herald repicó en inglés la noticia que la radioemisora WQBA (1140) había dado en español sobre la salida de Cuba de acaso el mejor prospecto de Grandes Ligas (MLB) tras el triunfo de la revolución de Fidel Castro: el lanzador derecho Maels Rodríguez, de 24 años, quien escapó junto con el camarero Yobal Dueñas, de 31.
Ambos fueron entrevistados por teléfono y expresaron que habían tomado la decisión más importante en sus carreras: irse de Cuba para jugar béisbol profesional en USA. A tono con la anormalidad revolucionaria en la Isla, su agente Henry Vilar declaró que había planificado la salida contrarrevolucionaria en bote para que buscaran asilo político o residencia en un tercer país y pudieran así firmar como agentes libres con cualquier club de MLB.
Tientos y diferencias
Aunque Liván Hernández y Danys Báez habían llegado más jóvenes a USA, Rodríguez lo hacía con mayor experiencia internacional y el pedigrí de haber lanzado a 100 millas por hora y un juego perfecto el 22 de diciembre de 1999, así como de ganar la triple corona en 2000: 15 victorias, 1,77 de promedio de carreras limpias y récord de ponches: 263 en 178 1/3 entradas.
Había quedado fuera del equipo Cuba por lesiones en el brazo y la espalda, pero declaró a WQBA que esto era un invento de la comisión técnica y probaría su calidad en el terreno. Al cabo los scouts se percataron de que su bola rápida andaba por 90-85 mph. Fue seleccionado en la ronda 22 del draft amateur por los Diamondbacks de Arizona y la disyuntiva que Alberto Águila planteó en este mismo sitio —ocaso o paréntesis del ídolo— acabó resolviéndose con que nunca llegó ni a ligas menores.
El pinareño Dueñas había debutado a los 17 años en las series nacionales y en una de ellas impuso récord de 31 bases robadas. Declaró que la comisión técnica procedió a suspenderlo por mantener relaciones con la familia de su compañero de equipo José Ariel “Titán de Bronce” Contreras, quien había dejado el team Cuba en octubre de 2002 para irse a MLB.
Entre las ofertas de los Astros de Houston, los Tigres de Detroit y los Yankees de Nueva York, Dueñas optó por esta última. Jugó 78 juegos en Doble A y Triple A, bateó para 265 y acumuló 16 dobles, 3 triples, 3 jonrones y 49 ponches. Los Yankees no renovaron su contrato de 60 mil dólares y se fue a la Liga Mexicana con los Tuneros de San Luis. Nunca regresó a MLB.
Duro mercado, pero es el mercado
Junto a otros peloteros cubanos que no llegaron o pasaron fugazmente por MLB, Rodríguez y Dueñas acreditan que el mercado es implacable, pero al menos encierra la oportunidad y regula mucho mejor el despliegue del talento que cualquier mecanismo del socialismo burocrático.
El 19 de marzo de 1962, Pepe Llanusa proscribió la práctica profesional del deporte mediante resolución del INDER, como si nadie supiera que para lograr máxima calidad y alto rendimiento en cualquier disciplina deportiva hay que practicarla a tiempo completo. Para el 22 de marzo de 2009, Fidel Castro largaría en una de sus riflexiones, al ser eliminado el team Cuba en el Clásico Mundial de Béisbol, que “muy duro será el camino para restablecer de nuevo la primacía de Cuba en esa actividad deportiva, donde el patriotismo, el orgullo nacional y nuestra lucha por el deporte sano y educativo alcanzó las más altas cimas”.
Así es, pero ese camino no se hace al andar de Antonio, hijo del quídam, con cosistas como el reciente acuerdo entre la Federación Cubana de Béisbol (FCB) y la Confederación Mundial de Béisbol y Sóftbol (WBSC) para contratar a jugadores y entrenadores de la Isla en circuitos profesionales fuera de MLB. Ese camino exige apartarse de la dirección autoritaria de la economía a fin de restablecer el buen desarrollo del béisbol y los demás deportes.
Ni orgullo ni patriotismo ni lucha por esto o aquello sustituyen a la economía. La debacle del béisbol en Cuba deriva en última instancia de la persistencia de la economía disfuncional tras la caída de aquel campo socialista que daba subvenciones políticamente justificadas al castrismo. La economía disfuncional con cartelito de socialista determinó que hoy en día sea muy difícil encontrar un buen terreno para jugar pelota (Foto) y que todo jugador apto para superar ese entorno adverso busque la oportunidad del mercado, aunque tenga que arrostrar agentes maliciosos, engaños, discriminación y demás distorsiones. Al menos ve luz al final del túnel.
Razones de Cuba
Al proscribirse el deporte profesional por el Gobierno Revolucionario, Cuba tenía 22 peloteros en MLB, más que Puerto Rico [11], República Dominicana [7] y Venezuela [3] juntos. En 1967 se alcanzó la cota de 30, que vino a igualarse en 2016. Hasta el debut de Ronald Bolaños —3 de septiembre de 2019— con los Padres de San Diego [División Oeste de la Liga Nacional], 211 cubanos han jugado en MLB [1].
De ellos sólo Atanasio “Tony” Pérez-Rigal ha entrado (en 2000) al Salón de la Fama. Y sólo la politiquería y el prejuicio explican su brillo por ausencia en el Salón de la Fama del Béisbol Cubano, que resucitó a fines de 2014 con la adición de 10 nuevas figuras a las 68 que habían sido exaltadas desde la creación del salón (1939) hasta 1960.
Al Salón de la Fama en Cooperstown entraron por sus méritos deportivos otros tres peloteros cubanos sin haber jugado nunca en MLB: Martín Dihigo, José de la Caridad Méndez y Cristóbal Torriente [2]. Por el contrario, el éxodo de peloteros de calidad para jugar como Dios manda —profesionalmente— surte efecto dentro de la Isla quizás más nocivo por borrarse la historia que por la ausencia misma de aquellos en las series y equipos nacionales.
Así como se prohibió caprichosamente, por ejemplo, que José Miguel Pineda saliera al terreno como director de Industriales por haber firmado como profesional en Costa Rica, aunque nunca llegó a jugar, las estrellas del deporte nacional pasan de la veneración a la censura por cargar con la patria en la mochila y salir en busca de mejor vida.
No sólo quedan como inelegibles para el Salón de la Fama, sino incluso para traerlos a colación en comentarios por los medios. De este modo el canibalismo que sufre la economía socialista se extiende a la historia de la pelota: sus partes y piezas se desmontan a conveniencia de intereses más acá del mérito. A la falta de buenos terrenos se suma el terreno mediático más malo para hablar de buenos peloteros.
Coda
Y si década tras década no se permite hablar sobre y discutir lo que pasa, los cubanos se tornarán tan obtusos que será muy duro el camino hasta para entender qué diablos pasó.
Notas
[1] Al considerarse que MLB nace con la Liga Nacional en 1876, se excluye a Steve [Enrique Esteban] Bellán, quien debutó el 16 de mayo de 1871 con el equipo Troy Haymakers en la Asociación Nacional de Béisbol Profesional (NAPBBP, por sus siglas en inglés). Los pioneros serían entonces Armando Marsans y Rafael Almeida, quienes debutaron el 4 de julio de 1911 con Rojos de Cincinnati.
[2] Completan el sexteto cubano allí el comentarista Felo Ramírez y el manager y empresario Alex Pompez.
© cubaencuentro.com
Los comentarios son responsabilidad de quienes los envían. Con el fin de garantizar la calidad de los debates, Cubaencuentro se reserva el derecho a rechazar o eliminar la publicación de comentarios:
- Que contengan llamados a la violencia.
- Difamatorios, irrespetuosos, insultantes u obscenos.
- Referentes a la vida privada de las personas.
- Discriminatorios hacia cualquier creencia religiosa, raza u orientación sexual.
- Excesivamente largos.
- Ajenos al tema de discusión.
- Que impliquen un intento de suplantación de identidad.
- Que contengan material escrito por terceros sin el consentimiento de éstos.
- Que contengan publicidad.
Cubaencuentro no puede mantener correspondencia sobre comentarios rechazados o eliminados debido a lo limitado de su personal.
Los comentarios de usuarios que validen su cuenta de Disqus o que usen una cuenta de Facebook, Twitter o Google para autenticarse, no serán pre-moderados.
Aquí (https://help.disqus.com/customer/portal/articles/960202-verifying-your-disqus-account) puede ver instrucciones para validar su cuenta de Disqus y aquí (https://disqus.com/forgot/) puede recuperar su cuenta de un registro anterior.