De paso por las Menores

Un grupo de jóvenes cubanos, ex jugadores de Series Nacionales, prueban sus habilidades en las Ligas Menores del béisbol norteamericano. Todos los equipos son sucursales de las 30 organizaciones de Grandes Ligas y aparecen ubicados en circuitos de clasificaciones Triple A, Doble A y A. Además, cuentan con seleccionados en la Rookie League, donde están los más bisoños, con un promedio de entre 18 y 20 años.

Con ello se busca que cada jugador actúe por un tiempo en el nivel que necesite, de acuerdo con sus capacidades y habilidades. Las Ligas Menores sirven también como escenario de práctica para los peloteros que han estado en la lista de incapacitados y se preparan para volver a incorporarse. En ocasiones también regresan a las Menores determinados atletas que sufren merma en su rendimiento.

Los jugadores cubanos que han mostrado previamente facultades, en un momento dado podrían escalar al Big Show, pero antes se foguean casi siempre en las Ligas de clasificación Doble A. Si logran avanzar allí, entonces son enviados a Triple A.

Las contiendas anuales de este tipo de béisbol se inician en el mes de abril, junto con la temporada de la Gran Carpa, lo que permite seguir paso a paso las demostraciones de cada deportista.

Kendry Morales es el único ex miembro de la selección nacional que ha llegado en esta campaña a las Mayores procedente de los equipos finca. El 8 de mayo fue llamado de su equipo, Salt Lake (Triple A), a los Ángeles de los Ángeles, para suplir al jardinero Juan Rivera, lesionado por 15 días. Con antelación, había sustituido unos días al lanzador Justin Spier, inhabilitado por dos semanas.

Mayores posibilidades

A juzgar por la productividad mostrada durante el mes de abril y lo que va de mayo, el que tiene mayores posibilidades de ser promovido a la pelota de lujo es Yunel Escobar, quien militó en Industriales hasta el año 2004 y juega ahora en el equipo Richmond (Triple A), correspondiente a los Bravos de Atlanta.

Escobar, que juega aquí en el campo corto y en la Isla fue suplente en la segunda almohada de los Azules, ha logrado 37 hits en 112 turnos y su promedio es de 330, una cifra excelente. Está en la mirilla del alto mando de los Bravos, ya que en la etapa de primavera mostró aptitudes con el guante y el bate.

Sin embargo, por ahora tiene la impedimenta de que el estelarísimo Edgar Rentería es el dueño del short stop, con Chris Woodward de suplente, y Kelly Johnson custodia la intermedia.

En el mismo conjunto donde milita Escobar, se desenvuelve Bárbaro Cañizares, también industrialista y que tiene average de 304 (17 imparables en 56 veces). Otro que juega en la antesala de las Mayores es el habanero Vladimir Núñez, en el Charlotte Knights, del Chicago Medias Blancas, y anda con un triunfo, 3 descalabros y 4.81 de efectividad.

Con el conjunto Altoon Curve (Doble A), supeditado a los Piratas de Pittsburg, lanza el pinareño Yoslán Herrera, con 3 derrotas sin victorias y 7.13 en carreras limpias. Ahí mismo está su coterráneo Alaín Soler, con uno y uno, y 2.89.

Francisley Bueno, otro azulejo, milita en el Mississipi (Doble A), del Atlanta. Su función es relevar, y tiene 1 y 2, con 4.58. En Clase A radica el lanzador vueltabajero Serguei Linares, que no ha ganado ni perdido en 6 innings de trabajo con la novena Hicory Crawdds, de los Piratas. En esta clasificación aparece también el primera base Juan Miguel Miranda, también de Pinar del Río, con el conjunto Tampa, enlazado a los Yankees de Nueva York. Su porcentaje es de 260, al conectar 34 indiscutibles en 131 oportunidades y 21 impulsadas en 34 juegos.

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