En buen momento
Con sus triunfos en lo que va de temporada, los jóvenes Escobar y Betancourt siguen regalando infinidad de emociones a la fanaticada cubana.
La histórica frase "llegué, vi y vencí" resurge con la llegada a Grandes Ligas de Yunel Escobar, jugador de cuadro que entre los años 2001 y 2004 estuvo con Industriales en las series nacionales.
Más que vencer, en un abrir y cerrar de ojos el muchacho ha convencido al alto mando del Atlanta, que le confió por unos días la custodia de la tercera base por lesión del titular Chipper Jones. Escobar ha impresionado a dirigentes y aficionados de los Bravos por su bateo, defensa de la esquina caliente, potente brazo y versatilidad, ya que también ha sido probado en el campo corto.
Su debut fue el primero de junio, una fecha para recordar siempre, pues el cubano puede convertirse en un gran pelotero. Le situaron como segundo bate y respondió de maravillas. Saludó al pitcher Rich Hill, de los Cachorros de Chicago, con un hit al jardín derecho, y después de fallar un par de veces, disparó una soberana línea de tubey al jardín izquierdo en el octavo inning, que sirvió para remolcar la carrera decisiva del choque que ganó Atlanta 4 a 3.
Escobar fue llamado de las Ligas Menores para sustituir a Jones por encima de los suplentes de cuadro Woodward, Pete Orr y Martín Prado, trío que estaba en la novena para cualquier emergencia. Sin embargo, es tan bueno el curriculum que atesora Escobar desde el año pasado, que los estrategas del conjunto no dudaron en subirlo a la Gran Carpa y entregarle el guante de inmediato.
El año anterior fue seleccionado tercera base regular para el Juego de las Futuras Estrellas, efectuado en Pittsburg. Durante el Entrenamiento de Primavera, discutió seriamente un puesto de sustituto con los jugadores ya mencionados, debido a que durante los 25 juegos preparatorios bateó 373, mucho más que el resto de todos los peloteros del conjunto, al disparar 19 incogibles en 51 turnos.
No obstante, prefirieron dejarlo en el Richmond, Triple A, conjunto afiliado al Atlanta. Al parecer, la chamarreta de este seleccionado le quedaba estrecha, ya que en abril y mayo "quemó" la Liga. En 46 juegos tenía 60 indiscutibles y promedio de 333, con 29 empujadas y 333 de average, para ser el líder de la novena en estos aspectos.
Con ese aval, a la hora de suplir a Jones, eficiente veterano de 35 años y 14 temporadas a cuestas, no dudaron en brindarle esa oportunidad. También podría estar en planes para reemplazar al short stop Rentería, que es todo una estrella y, al igual que Jones, devenga un salario extraordinario. Quizás nuestro paisano, de sólo 24 años de edad, serviría para un posible canje de envergadura, porque es un talentoso jugador en pleno desarrollo.
En su segundo enfrentamiento vino la serie de cuatro juegos contra los Marlins, conjunto que fue acribillado por el bateo del cubano, quien conectó siete indiscutibles en 16 turnos.
Los aficionados de la Isla, y especialmente los de la capital, recordarán que Escobar fue suplente de cuadro durante cuatro campañas con los Azules, intervino en 215 juegos, que es un promedio de 24 partidos por contienda, con 119 hits en 439 turnos al bate y average de 271.
Betancourt, en gran momento
El otro jugador de cuadro procedente de la Isla que está actualmente en la Gran Carpa es Yunieski Betancourt, quien acaba de tejer una cadena de 20 juegos seguidos bateando de hits, lo que demuestra el alto grado de perfeccionamiento que desarrolla el pelotero de Villa Clara en estos momentos.
El 20 de mayo comenzó la racha de imparables seguidos y entre los pitchers que han sido sus víctimas están abridores de clase como Bartolo Colón, Kevin Millwood, Casey Fussom, Gil Meche, Odalys Pérez, Erwin Santana, Justin Germano, Robinson Tejeda y David Wells. La seguidilla del cubano era la más larga en lo que iba de este campeonato, pero se quebró el domingo al fallar en cuatro turnos.
Betancourt, que ha participado en 57 de los 58 juegos del equipo, tiene 62 hits y 14 dobles con 26 empujadas y promedio de 301. Magníficos resultados para un hombre que batea en el octavo turno de la alineación marinera.
Todo indica que tanto Escobar como Betancourt podrán regalar infinidad de emociones a la fanaticada cubana, ávida de ver a muchos más jóvenes en el mejor béisbol del mundo.
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