Un mes por delante

De todos los miembros del reducido contingente cubano en las Grandes Ligas, el único que parece seguro con el boleto a los play-offs es Orlando El Duque Hernández.

Cuando resta un mes para el final de la temporada regular, todavía no se sabe quiénes serán los aspirantes a la corona de las Grandes Ligas, porque el número de equipos involucrados en la batalla por el wild card en ambos circuitos conforman una madeja difícil de desenredar.

Por ahora, parecería que José Ariel Contreras podría repetir su viaje a fines de octubre si es que finalmente los Medias Blancas de Chicago se apoderan del comodín en la Liga Americana, porque a los Tigres no podrán sacarlos del tope de su división.

Pero en ese circuito los actuales campeones no se encuentran seguros, y más bien están asediados por los Mellizos de Minnesota, un equipo del que poco se hablaba en el comienzo del año y que parece decidido a todo por regresar a los play-offs.

Los patiblancos no parecen ese equipo sin fisuras que terminó a todo tren el año 2005. Varias lesiones, sumadas a ciertas inconsistencias de su pitcheo abridor, los han colocado en una verdadera encrucijada.

Por otra parte, tampoco se puede descartar a Boston, uno de los perennes visitantes de la postemporada, que atraviesa un momento crítico, tras una barrida de cinco juegos en su propio estadio a manos de los Yankees de Nueva York.

Los Medias Rojas aún aparecen a una distancia nada despreciable de Chicago y Minnesota, y darlos por muertos sería bastante apresurado, sobre todo, si se toma en cuenta la historia reciente.

Los Angelinos de Los Ángeles se creían destinados a retornar a lo más alto con un conjunto que parecía una acorazado, pero hasta ahora han sido decepcionantes y sus aspiraciones se desvanecen.

Kendry en Menores, Danys operado

Por otra parte, el cubano Kendry Morales, que comenzó muy bien con el equipo de la ciudad de Anaheim, fue bajado a las Ligas Menores y es muy difícil que haga el grado en el equipo grande, si es que clasifica.

Sin embargo, nada es comparable en la Liga Americana con lo que sucede en el viejo circuito, donde 10 equipos batallan entre sí por el wild card y donde ni los actuales líderes divisionales tienen nada ganado de manera definitiva.

San Luis y Cincinnati —donde lanza Bronson Arroyo, quien también posee raíces cubanas— son los que, a primera vista, poseen más credenciales para dividir entre sí el liderato en la división Central y el comodín, pero tras ellos viene una jauría de clubes listos para desbancarlos.

Uno de ellos es Arizona que, irónicamente, se deshizo de El Duque y dos meses después contrató a su medio hermano Liván Hernández para intentar un final de temporada como el que no disfruta desde 2001 cuando ganó la Serie Mundial.

Liván es conocido como un hombre de hierro en el box y ya nada tenía que hacer con los Nacionales de Washington, que se han desbaratado en pedazos y no tienen otra cosa en que ocuparse que no sea mirar hacia la venidera contienda.

Pero la tarea de los Diamondbacks —donde también milita el cubanoamericano Luis González— y de Liván es bien difícil, porque el equipo muestra evidentes carencias y acaba de enviar a los Mets a Shawn Green, uno de sus mejores artilleros.

Otro equipo que buscó a un cubano en pos de revivir sus esperanzas fue el de Atlanta; pero Danys Báez, al parecer, no lanzará más en lo que queda de temporada tras ser operado de apendicitis. Nada parece impedir la abdicación de los Bravos al trono que mantuvo en el Este de la Nacional por 14 años consecutivos.

© cubaencuentro.com