Deseos para la Cuba de 2012 (II)

CUBAENCUENTRO ha preguntado a activistas, intelectuales y artistas de Cuba y del exilio cómo ven la Cuba del 2012… y cómo la sueñan. Estas son algunas de sus respuestas:

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Eugenio Yáñez.

Eugenio Yáñez, analista y Doctor en Economía.

¿Cómo auguras que será el año 2012 para Cuba?

Ni tan bueno como promete el régimen, ni tan malo como asegura Miami. La Conferencia del Partido decepcionará a los que esperan algo importante de ella. Las cifras macroeconómicas seguirán siendo un desastre, pero el efecto de las relaciones de mercado que se van imponiendo se hará sentir en los niveles más elementales de consumo de la población. Habrá más cubanos que dependerán menos de Papá-Estado, sea por cuentapropistas o por ayuda de sus familiares desde el exterior. Aumentará la corrupción en las altas esferas y las condenas por esa causa. No sería sorprendente alguna purga de menor escala en las FAR o el MININT, una protesta masiva en algún lugar del interior del país, o ambas cosas. La población seguirá perdiendo poco a poco el miedo, y se harán más evidentes las muestras de inconformidad y protesta. Aumentará la represión “sofisticada”, con detenciones de corta duración, mítines de repudio y golpizas. La salud de Hugo Chávez y los resultados electorales en Venezuela influenciarán el rumbo del Gobierno. Alguno de los ancianos de la gerontocracia completará su ciclo biológico en esta vida.

¿Cuáles son tus deseos para la Cuba de 2012?

Sueños, ilusiones y deseos no tienen por qué coincidir. Sueños e ilusiones: que Cuba fuera un Estado de derecho pleno, una democracia completa, sin exiliados, y sobre todo sin odios ni rencores, aunque los principales responsables hayan sido llevados a los tribunales, y que la economía prospere gracias a la participación de la propiedad privada y la eliminación de la ineficiencia totalitaria. Ahora, los deseos deben ser más realistas: que no haya violencia ni baño de sangre en Cuba, que se pueda evolucionar en una situación en que las cosas vayan mejorando sin marcha atrás, y que entre todos los cubanos, dentro y fuera de la Isla, encontremos soluciones realistas, factibles y pragmáticas.

Otro deseo muy claro para 1912: la mayor felicidad y dicha para todos los cubanos, dentro y fuera de la Isla.

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Alejandro Anreus.

Alejandro Anreus, Doctorado en Historia del Arte (Centro de Estudios de Postgrado, CUNY. Actualmente profesor de arte en la William Paterson University de New Jersey. Publicó recientemente el poemario Memento Mori (Blurb, 2011)

¿Cómo auguras que será el año 2012 para Cuba?

Contradicciones y dificultades cada día mayores dentro

del régimen y sus facciones. Crecimiento de la disidencia y mayor reconocimiento de esta mundialmente. Tensiones constantes entre represión y reforma/cambio.

¿Cuáles son tus deseos para la Cuba de 2012?

Si la Administración Obama gana reelección, que esta por fin se ponga a negociar en serio —con rigor y principios, pero también pragmatismo que mira hacia el futuro— con la Isla. La desaparición física y psicológica de Fidel Castro —tras la cual pueda comenzar una verdadera liberación, que con un poco de tiempo lleve al cambio hacia la transición.

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Mercedes Eleine González.

Mercedes Eleine González. Licenciada en Letras Hispánicas y Comunicación Social y Periodismo. Ha publicado El mundo de Laura (Palibrio, 2011), de literatura infantil.

¿Cómo auguras que será el año 2012 para Cuba?

Auguro para Cuba la misma situación de estancamiento en la que ha permanecido durante tanto tiempo, porque mientras estén los Castro en el poder Cuba nunca será un país desarrollado desde el punto de vista económico y jamás ningún cubano que viva en la Isla disfrutará de libertad individual ni posibilidad de progreso ni comodidad de ninguna índole. No hay opciones de una vida mejor para los cubanos mientras este gobernando la Isla la estirpe de los Castro. Es triste pero es una dura realidad. No creo en la cúpula gobernante de Cuba, nunca creí en ellos, después de que salí de Cuba lo corroboro todos los días.

¿Cuáles son tus deseos para la Cuba de 2012?

Me gustaría que no hubiera trabas para viajar a mi país de origen, que no hubiera que pedirle permiso a nadie para entrar y salir de Cuba libremente, que no se nos mirara mal como desertores o traidores a los cubanos que por disímiles razones vivimos fuera del país, me gustaría que todos los cubanos en la Isla pudieran conocer lo que significa tener derechos humanos y que se respetaran, que Cuba diera opciones de trabajo profesional a los cubanos que quisieran quedarse definitivamente a vivir nuevamente allá, no importa el tiempo de permanencia fuera, ni las razones que tuvieron para emigrar, porque cada uno de nosotros en mayor o menor medida vive con el sabor de la nostalgia y debe llegar el día en que no haya razones para dejarle paso a la tristeza. Quiero para Cuba libertad, desarrollo y progreso, que sea una tierra bendecida por la Mano Divina de Dios. Quiero una Cuba con libertad y sin la sombra de los Castro.

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Baltasar Santiago Martín.

Baltasar Santiago Martín, director de la Fundación APOGEO para el arte público.

¿Cómo auguras que será el año 2012 para Cuba?

Aunque soy ingeniero estructural, la ingeniería social es una ciencia demasiado impredecible como para hacer conjeturas, porque nadie en 1979 hubiera podido imaginarse que la Unión Soviética y el Campo Socialista implosionarían a partir de la Perestroika y la Glásnot de Gorbachov diez años después, ni que el Muro de Berlín sería derrumbado y que Alemania se reunificaría, así que no quiero ponerme a especular sobre que pasará en el año 2012 en Cuba, por lo que prefiero pasar a la segunda pregunta, que es sobre mis deseos/sueños/ilusiones para mi país en el futuro inmediato, no sin antes compartir con los lectores de CUBAENCUENTRO esta reflexión metafísica: “Para que el milagro colectivo que anhelamos se nos conceda, tenemos todos que estar en la misma frecuencia, desear lo mismo, y dejar el oportunismo y la simulación, porque a Dios sí no se le engaña”.

¿Cuáles son tus deseos para la Cuba de 2012?

Como ya el país se nos fue de las manos en 1959, no quiero yo que, cuando sobrevenga el cambio que deseo, sueño y me ilusiona —que ojalá se dé ya de veras en el 2012—, se nos vaya a ir de nuevo, por lo que debemos irnos preparando desde ahora para ese momento, en que podamos comenzar a edificar un verdadero estado de derecho, donde la sociedad civil nunca quede supeditada a un solo hombre o grupo social, y la prensa y la opinión pública jueguen un papel preponderante, como en toda sociedad democrática que se respete, y donde nuestro odio al totalitarismo socialista no nos lleve a desbaratar el sistema de salud existente y privatizarlo, ni a desmantelar el Ballet Nacional de Cuba, orgullo de la nación, porque Alicia Alonso haya apoyado al castrismo hasta el final.

Una vez que Dios y el destino nos libren de la tiranía, debemos dejar a un lado los odios y los protagonismos intransigentes para comenzar a construir la patria nueva, “con todos y para el bien de todos”, como lo soñó Martí.

Ni seudo-república ni anti-república; ni capitalismo despiadado ni comunismo.

La cordura debe imperar en el necesario pluripartidismo que vendrá, y la salud, el deporte, la educación y la cultura deberán seguir siendo un derecho del pueblo, sin aplicarles los mecanismos del Mercado, que se deben reservar para la producción de bienes materiales y servicios, sin descartar la existencia de instituciones privadas de salud y educación para los que las prefieran y las puedan pagar.

Además del diálogo abierto y fluido, otra de las claves será el ejercicio sano y enérgico de la crítica, a través de la libertad de prensa y de expresión total que deberá existir.

La libre competencia y el libre mercado deben garantizar a los consumidores la calidad y los precios asequibles que estos se merecen, y los sindicatos deben velar, independientemente del estado y de los patronos, por los derechos de sus agremiados, sin prestarse a manipulaciones.

No es una utopía pretender esto, los cubanos ya tenemos la suficiente madurez y experiencia para saber lo que queremos y lo que necesitamos.

La nueva constitución, elaborada sobre la base de la de 1940, debe prohibir las re-elecciones y establecer plazos de gobierno nunca mayores de 6 años, así como reducir o eliminar el Ejército, dejando solo una policía eficaz y bien pagada, para que no se corrompa, y siempre sometida al escrutinio público.

La única tiranía deberá ser la de la opinión ciudadana, debidamente consultada y consensuada a través de Internet y de encuestas a la población, y entonces todos juntos, negros, mulatos, jabaos y casi blancos (por aquello de que el que no tiene de congo tiene de carabalí), cubanos hermanos por encima de todas las cosas, al fin seremos redimidos por nuestras propias manos, y demostraremos al mundo que la prosperidad de Miami será también la de La Habana y la de los restantes ciudades y pueblos de la entonces de verdad flamante y floreciente REPÚBLICA DE CUBA con mayúsculas.

Dinos tú cómo ves y cómo sueñas nuestra Isla para el nuevo año, en Facebook o en Twitter, con la etiqueta #miCuba2012

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