El canadiense Morneau está ansioso por volver a la competición

No está completamente recuperado, pero el primera base canadiense Justin Morneau está ya mentalizado para volver a jugar en el mes de abril con su equipo de los Mellizos de Minnesota.

Morneau declaró que se siente mejor que hace siete meses, cuando una conmoción puso fin a su campaña, y aunque es posible que se pueda perder todavía los primeros partidos de la nueva temporada, su moral es alta y está convencido que regresará en plenitud de condiciones.

El estelar primera base habló con los periodistas, un día antes que los jugadores de posición de los Mellizos se deben presentar para los entrenamientos de primavera.

Morneau sufrió la lesión el 7 de julio en Toronto y aunque intentó recuperarse lo antes posible al final se dio cuenta que lo mejor era olvidarse de la vuelta y más cuando ya no iba a poder ayudar a los Mellizos en la fase final del campeonato.

“Fue el objetivo de los playoffs, el objetivo de todo, pero ha sido una lucha todo el invierno”, destacó Morneau. “Hemos hecho todo lo posible para tratar de salir de esto y estar listo”.

Más de siete meses después de lesionarse al deslizarse en la intermedia, Morneau aseguró que está mejor.

Ha vuelto a entrenar, pero hay síntomas que persisten. Se estima que no estará en los primeros cuatro o cinco juegos de pretemporada, una precavida recuperación con miras al juego inaugural de la temporada, el 1 de abril.

Dice que a veces queda algo mareado tras un entrenamiento intenso, y por eso es que ha desistido dar plazos específicos.

“No diría que estoy al ciento por ciento, pero creo que esto es lo más cerca que he estado”, admitió Morneau. “Lo que cuesta es superar el último tramo”.

Los médicos del equipo aún no le han dado la luz verde para que se incorpore plenamente a los actividades de béisbol, pero ya ha podido enfrentar a lanzadores en las prácticas de bateo y cumplir con los rigores de los entrenamientos diarios.

“Haber logrado estar ya en esa fase de preparación es algo muy importante para mí, aunque sé que todavía queda un poco más de esfuerzo hasta conseguir la meta final”, destacó Morneau. “El apoyo que he recibido de todos los compañeros y organización ha sido fantástico”.

Antes de lesionarse, Morneau, de 29 años, había disputado 81 partidos para tener .345 de promedio de bateo, tras 296 viajes al plato y pegar 102 imparables, de los cuales 18 fueron jonrones. Impulsó 56 carreras y anotó 53.

© cubaencuentro.com