El presidente venezolano, Hugo Chávez, dijo este lunes que será imposible la reconciliación con el mandatario colombiano, Álvaro Uribe, luego de que ambos intercambiaron duras acusaciones al agudizarse una crisis diplomática que amenaza los vínculos económicos entre los dos países, informó la AP.

Chávez anunció el domingo que congelaba las relaciones bilaterales, a raíz de que Uribe suspendiera la mediación del presidente venezolano entre Bogotá y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en busca de un canje de efectivos de la organización presos por rehenes secuestrados.

El gobierno de Uribe argumentó que Chávez rompió las condiciones de la mediación al entablar contacto directo con el mando del ejército colombiano.

Las relaciones con Colombia han llegado a su "más grave crisis", dijo Chávez en una entrevista televisada en la madrugada del lunes. Es posible buscar vías para mantener abiertos los canales diplomáticos, pero "no de reconciliación (…) cuando se llegan a estos niveles ya entre dos jefes de estado es imposible", afirmó.

Advirtió que las relaciones económicas resultarán perjudicadas, y añadió que Venezuela estará en alerta ante presuntas amenazas militares de Colombia.

Uribe advierte a Chávez que Colombia está fuera de su 'proyecto expansionista'

Un una dura respuesta a la decisión de congelar las relaciones, Uribe dijo a Chávez que Colombia necesita "una mediación contra el terrorismo y no legitimadores del terrorismo".

"Sus palabras y sus actitudes dan la impresión de que usted no está interesado en la paz de Colombia, sino en que Colombia sea víctima de un gobierno terrorista de las FARC", precisó el mandatario.

Durante un discurso en Calamar, unos 450 kilómetros al norte de Bogotá, el presidente colombiano dijo que Chávez tiene un proyecto expansionista en el continente.

"La verdad, presidente Chávez, es que si usted esta fomentando un proyecto expansionista, en Colombia ese proyecto no tiene entrada (…) No se puede incendiar el continente como usted lo hace, hablando un día contra España, al otro día con los Estados Unidos, maltratando un día a México, al siguiente al Perú, en la mañana después a Bolivia", dijo en tono molesto.

Agregó que Chávez no tiene argumentos y apela a los insultos, con lo cual lo único que hace es afectar "no solamente las relaciones internacionales" sino en este caso herir "la dignidad del propio pueblo de Venezuela".

"No se puede" hablar de imperialismos, "cuando usted basado en su presupuesto quiere montar un imperio", dijo el presidente colombiano dirigiéndose al venezolano.

"No se puede maltratar la historia, no se puede manchar la memoria de los héroes, desfigurándolos en la demagogia popular, para desorientar a los pueblos", continuó.

Uribe, quien en un comunicado el viernes trató de bajar el tono de la disputa, dijo a Chávez: "La verdad con testigos es que no se puede desorientar al pueblo interpretando mal el legado del libertador (Simón) Bolívar. El Libertador fue integracionista, pero no expansionista".

Bolívar "no andaba tratando de sacar del territorio americano la dominación europea para imponer como usted quiere hacerlo su propia dominación, basada en el poderío de su presupuesto", señaló Uribe.

En tono enérgico, afirmó que "Colombia tiene todo el derecho de derrotar el terrorismo, tiene todo el derecho a aceptar mediaciones, pero no mediaciones que busquen el protagonismo político, el enseñoreamiento político del terrorismo".

El mandatario colombiano se manifestó además preocupado por las pretensiones electorales de Chávez. "Ahora trate de apelar al viejo truco de estimular en Venezuela, odio contra Colombia y contra el gobierno de Colombia, para abusar su favorecimiento electoral", dijo.

Pidió a los venezolanos reflexionar sobre la actitud del gobierno de Chávez que, mientras "no es capaz de censurar a las FARC, sí censura injustamente al gobierno de Colombia y la contradicción es que el gobierno de Colombia (…) jamás ha irrespetado al gobierno de Venezuela ni al pueblo de Venezuela".

Aunque en Colombia "hay pobreza y limitaciones", también "hay dignidad. El dinero se consigue todos los días, así en unas naciones sea más escaso que en otras, pero la dignidad, el respeto al ser social, el respeto a las libertades individuales, cuando se pierden esos valores es difícil volver a recuperarlos (…) No admitimos que se abuse de nuestra tragedia para darle la razón al terrorismo", advirtió Uribe.

Arrancando el aplauso de los asistentes, el presidente aseguró que no admitirá que se incorpore a "Colombia en un proyecto expansionista que poco a poco va negando las libertades que con tanta dificultad este continente ha logrado conquistar".

Chávez dice que Uribe le lanzó 'un escupitajo a la cara'

Tras anunciar el domingo la congelación de las relaciones, Chávez dijo que Uribe "le dio un escupitajo a la cara" y que "está mintiendo de manera descarada".

"Declaro al mundo que las relaciones con Colombia las meto en un congelador porque le perdí total confianza en nadie en el gobierno" de ese país, dijo el gobernante en una transmisión del canal estatal de televisión.

Según Chávez, el comunicado de Bogotá que explica el fin de su mediación en el conflicto con las FARC "está cargado de mentiras".

"Lo que el presidente de Colombia ha hecho es lanzar un escupitajo, brutal, en el rostro, en nuestro rostro, que le pusimos el alma para tratar de buscar ese camino hacia la paz. (Fue) un verdadero escupitajo, indigno", afirmó Chávez.

El gobernante venezolano dijo a sus ministros y personal militar que deben "estar en alerta en relación con Colombia. Las relaciones económicas (…) comerciales, todo eso se va a perjudicar, es lamentable, pero ¿cómo se hace pues? (…) Ustedes tienen enfrente a un hombre que tiene dignidad".

"Yo creo de verdad, de verdad, que el gobierno de Colombia no quiere la paz", sentenció Chávez. "La patada que le dieron a la mesa, yo creo que se la dieron para evitar el camino a la paz", añadió.

Acusó al gobierno colombiano de no apreciar "todos los esfuerzos" que hicieran muchas personas en los últimos tres meses. "Hasta la vida la arriesgaron, metiéndose en esos lugares peligrosos a buscar a (Manuel) Marulanda", alias Tirofijo, jefe de las FARC.

Chávez afirmó que sus gestiones habían avanzado mucho, dijo estar "muy seguro" de que se habría logrado el acuerdo humanitario, y consideró "una falta de respeto del presidente Uribe" terminar la mediación "sin siquiera una llamada".

"Se lo digo claro (Uribe), porque usted no da la cara, manda a que saquen papeles, manda a que hablen por usted. Yo no, yo doy la cara, mi vergüenza (…) y el presidente Uribe está mintiendo... de manera descarada, fea, horrible (…) Creo que Colombia merece otro presidente, merece un mejor presidente, un presidente que sea digno, lo merece", dijo Chávez.

Tras la respuesta de Uribe, Chávez lo acusó, como hace habitualmente con sus enemigos, de ser un seguidor del "imperio".

"A Uribe se le cayó la mascara: el discurso de (George W.) Bush, ése es el propio Uribe (…) es el discurso del imperio", dijo.

Aclaró que Caracas no "romperá las relaciones", pero que "esto va a afectar todo (…) Nosotros nos olvidamos de la CAN, no vamos a la CAN (Comunidad Andina de Naciones), definitivamente", dijo.

La batalla verbal que entre los dos mandatarios ha provocado inquietud entre los diversos sectores de Colombia, que mantiene ahora unos niveles récord de exportaciones a Venezuela por unos 4.300 millones de dólares, que se espera lleguen en el 2007 a unos 6.000.

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