Las Damas de Blanco exigen ante el Ministerio de Justicia libertad para los presos políticos

Las Damas de Blanco, mujeres familiares de los 75 disidentes encarcelados en la primavera de 2003, exigieron este viernes ante el Ministerio de Justicia, en La Habana, la liberación de sus allegados, al inicio de una jornada de cuatro días de actividades por el quinto aniversario de la llamada "Primavera Negra", informó la AFP.

"¡Libertad para los presos!", gritaron las mujeres a las puertas de la institución, donde entregaron una carta dirigida al fiscal general, Juan Escalona, en la que le piden que los disidentes "presos injustamente" regresen a sus hogares.

"Esperamos que esta gestión dé resultados, lo único que deseamos es que sean liberados pronto", declaró Laura Pollán, una de las portavoces del grupo surgido a raíz del encarcelamiento en 2003 de 75 disidentes, condenados a penas de hasta 28 años.

Tras entregar la misiva sin dificultad, las mujeres echaron a volar una veintena de palomas blancas y clamaron por la liberación de sus allegados, ante la mirada extrañada de algunos transeúntes, mientras otros les gritaban insultos.

En la carta a Escalona, las Damas de Blanco denunciaron que los disidentes presos "están privados de libertad sin haber cometido delito alguno, pues se limitaron a expresar sus opiniones libremente y reclamar el respeto a los derechos humanos", reportó EFE.

"Una parte importante de ellos se encuentra en prisiones situadas fuera de sus provincias de origen; y todos están mezclados con prisioneros comunes de toda clase, recibiendo malos tratos, una alimentación pésima y una asistencia médica y odontológica deficiente", añadieron en la misiva.

Para llegar al Ministerio de Justicia, las mujeres recorrieron kilómetro y medio desde la casa de Pollán, donde se reunieron para dar inicio a la jornada de cuatro días de actividades, fundamentalmente de marchas, en conmemoración de la oleada represiva de 2003, la mayor desatada por el régimen en décadas.

Vestidas con ropa blanca, incluida una camiseta con la imagen de sus familiares y con un número 55 en la espalda —en referencia a los miembros de los 75 que aún continúan presos— las Damas de Blanco, Premio Sajarov 2005 del Parlamento Europeo, marcharon en silencio durante media hora por calles de la capital.

En una declaración leída por Pollán en su casa, las mujeres reclamaron al gobierno de Raúl Castro que los cambios que ha prometido a los cubanos comiencen con la "liberación inmediata e incondicional" de los presos, muchos de los cuales están "muy enfermos".

"Se requieren hechos, no palabras", señalaron en el texto.

Las mujeres se quejaron además de las personalidades extranjeras que han visitado la Isla recientemente y no se han entrevistado con disidentes, entre ellas el comisario europeo Louis Michel y el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Tarcisio Bertone.

"Lamentablemente, ninguno visitó una prisión al azar, ni se entrevistó con nuestros prisioneros", dijeron.

Loyda Valdés, esposa de Alfredo Valdés, condenado a 26 años, declaró a EFE que está "esperanzada" porque el gobierno de Cuba firmó recientemente dos pactos de la ONU sobre derechos humanos y cree que eso "abre una nueva expectativa de que se reconozca la inocencia" de los presos.

Pero agregó que ha sufrido "una gran decepción con las autoridades" cubanas, porque ha sido imposible dialogar con ellas, a pesar de haberles dirigido varias peticiones.

© cubaencuentro.com