La esperanza se llama Yuniesky Betancourt
El villaclareño, con los Marineros de Seattle, apunta maneras de futura estrella.
El otro jugador de raíces cubanas que debe estar en los play-offs es el receptor de los Yankees de Nueva York, Jorge Posada.
En la División Oeste de la Liga Americana, donde juega Yuniesky Betancourt, los Atléticos de Oakland (90-66) tienen prácticamente en un bolsillo el pase a los play-offs. La mejor arma de este siempre batallador conjunto es el pitcheo, categoría en la que ocupan el tercer puesto en la Liga.
En la División Central, los Tigres de Detroit y los Mellizos de Minnesota sólo necesitan determinar quién avanza como líder y quién como comodín, tras el descalabro de los Medias Blancas de Chicago (87-70).
Los actuales campeones no pudieron mantener el ritmo en la recta final, debido, principalmente, a la pobre actuación de su pitcheo. El cuerpo de lanzadores abridores que tanto ayudó al equipo el año pasado se ha desplomado. El pinareño José Ariel Contreras lleva cuatro victorias y nueve derrotas desde el Juego de las Estrellas. En total, el equipo ocupa el décimo puesto en la Liga en este importante departamento.
Los Tigres, en Detroit, tuvieron una mala segunda mitad de campaña, lo cual presagió su eliminación de los play-offs, pero al final han logrado el pase. Es la primera vez que el equipo clasifica desde la temporada de 1987. Todo lo contrario ocurre con los Mellizos, uno de los conjuntos que mejor ha jugado en los últimos tres meses, siendo actualmente primero en bateo, segundo en pitcheo y tercero en fildeo.
Liga Nacional: Filadelfia, Houston, San Diego y Los Ángeles por una plaza
Los Filis de Filadelfia (82-74), de la mano de los jonrones de Ryan Howard, dominan el Wild Card de la Liga Nacional junto a los Dodgers de los Ángeles (82-74). El equipo de California, además, tiene posibilidades por la división Oeste, la cual comandan los Padres de San Diego, con récord de 84-72.
En la División Central, los Cardenales de San Luis (80-75) están pasando por un mal momento. Llevan seis derrotas seguidas y han visto reducida la ventaja a sólo dos partidos y medios sobre los Astros de Houston (78-78), que a su vez llevan una racha de seis victorias de forma consecutiva. El final de esta división del viejo circuito, en la que además los Rojos de Cincinnati (77-79) se mantienen con vida, promete ser de infarto.
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