Play-offs a la vista

El mes de octubre ya está en el horizonte. Con su llegada, la afición beisbolera disfrutará de los play-offs, donde compiten los cuatro equipos de mejores resultados de las Ligas Nacional y Americana.

La temporada regular concluirá el próximo 28 de septiembre: a cada conjunto le restan entre 15 y 20 juegos por desarrollar de los 162 del calendario. Con la excepción de los Angelinos de los Ángeles, los demás contendores que irán a la postemporada no han asegurado el pase a la series divisionales.

En el Joven Circuito, los Angelinos son los primeros clasificados como representantes de la Zona Oeste, con una ventaja de más de 15 juegos sobre Texas, su más cercano seguidor, y muy alejados del Oakland y el Seattle. Mientras, el sorprendente Tampa Bay, en el Este, mantiene una ventaja corta sobre el acechante Boston, pero se "tambalea" ante la presión enorme que representa ser líder por primera vez, después de tantos años como dueño del sótano. Los Yankees de Nueva York están fuera de la lucha, al igual que Toronto y Baltimore.

Los Medias Blancas de Chicago y los Gemelos de Minnesota se disputan seriamente el primer puesto del Grupo Central, en una pugna de "quítate tú para ponerme yo", muy por arriba de los Indios de Cleveland, los Tigres de Detroit y los Reales de Kansas City.

Los Mets de Nueva York se perfilan como candidatos supremos en el Este de la Liga Nacional, pero Filadelfia está muy cerca de ellos y cualquier cosa puede suceder, sobre todo al recordar lo ocurrido a los primeros en 2007. Cuando faltaban casi la misma cantidad de encuentros que ahora, se desmoronaron completamente y fueron los Filis quienes se llevaron el lugar de honor.

En la Zona Central, todo parecer indicar que los Cachorros de Chicago se mantendrán en la cima por encima de los Cerveceros de Milwaukee, los Cardenales de San Luis, los Astros de Houston, los Rojos de Cincinnati y los Piratas de Pittsburgh.

La llave del Oeste mantiene en suspenso a los fanáticos de Arizona y de los Dodgers de Los Ángeles, que marcan el paso indistintamente, separados completamente de los Rockies de Colorado, los Gigantes de San Francisco y los Padres de San Diego.

Cubanos en la postemporada

En 10 de los últimos 11 años, hubo varios lanzadores cubanos de series nacionales en los play-offs, pero todo parece indicar que se han esfumado con el decurso del tiempo, enemigo principal de los deportistas en la difícil etapa de los 30 años, o cuando se ronda o pasa de los 40.

En 1997, Liván Hernández comenzó a hilvanar una cadeneta que sólo se interrumpió en 2006, cuando ningún pelotero de las contiendas cubanas estuvo presente en la postemporada. Hernández también acudió a los eventos en los años 2000 y 2002, con el San Francisco, y en 2007, con el Arizona.

En la contienda de 1998, Orlando El Duque Hernández remachó su inicio en la Gran Carpa con su presencia en la postemporada vistiendo la camiseta rayada de los Yankees, y también lo hizo en las tres temporadas siguientes. Como si esto fuera poco, en 2004 regresó a los Yankees y en 2005 apareció con los Medias Blancas de Chicago.

José Ariel Contreras, el otro de los "tres grandes" tiradores cubanos de la década pasada, jugó en la finalísima en 2003, con los Mulos de Manhattan, y en 2005, con los Medias Blancas de Chicago. También actuó en una serie de división el pinareño Danys Báez: en 2001 con los Indios de Cleveland, que en esa ocasión luchó contra los Marineros de Seattle.

Del tiempo que evaluamos, correspondió al torpedero Reynaldo Ordóñez ser el primer pelotero de cuadro en presentarse en la ronda más fuerte de la pelota norteamericana, como short stop de los Mets de Nueva York, en la parte final de 1999. No le fue nada bien durante esa temporada, que puede definirse como el inicio de su rápido declive tras asombrar al mundo con sus fildeos maravillosos.

Por lo visto, se ha llegado a la era en que los jugadores cubanos que se desempeñan en el cuadro acaparan la atención por encima de los pitchers: Yuniesky Betancourt brilla con los Marineros de Seattle desde hace cuatro años; Yunel Escobar es el titular del campo corto en el Atlanta; y Alexei Ramírez ya se hace respetar entre los mejores segunda base de la Liga Americana.

Ramírez y Morales

Ramírez llegó de cero y se ajustó al poco tiempo a los requerimientos del mejor béisbol del mundo. Sus numeritos al bate han asombrado a todos y sus desplazamientos alrededor del segundo saco lo han catapultado a la fama. Puede estar en los play-offs con los Medias Blancas de Chicago. Todo depende de que el conjunto que dirige el venezolano Ozzie Guillén logre zafarse del acoso de los Gemelos de Minnesota.

La otra posibilidad corresponde a Kendry Morales, en un momento donde nadie pensaba que lo subieran, después que el alto mando de los Ángeles se hiciera de los servicios de Max Teixeira, otro bateador designado y primera base.

Morales aparece en la lista de los 40 jugadores elegibles del equipo, pero, como es conocido, solamente 25 aparecen en el roster regular, que el mánager dará a conocer antes del primero de los dos play-offs. De igual forma, antes del segundo tope, el mentor puede cambiar su relación de peloteros, aunque siempre entre los 40 elegidos.

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