Un cuarteto estelar

Comenzar la temporada en Grandes Ligas como regular es una de las máximas ambiciones de los peloteros jóvenes. Cuatro cubanos de la última generación estarán desde el primer día en los rosters de sus equipos.

Alexei Ramírez, Yunieski Betancourt, Kendry Morales y Yunel Escobar, un cuarteto bien conocido en la Isla por su corta pero eficaz trayectoria en Series Nacionales, tendrán la enorme responsabilidad de ocupar turnos importantes en la alineación diaria.

A propósito, hace muy pocos días finalizó el II Clásico Mundial de Béisbol. Nadie pone en duda que ellos podrían haber integrado la selección nacional si Cuba fuera un país completamente libre, donde ningún dirigente evitara su participación.

Ramírez, que en su debut en 2008 con los Medias Blancas de Chicago lució todo un coloso con el guante y el bate, podría defender el campo corto, una posición que ha practicado antes; aunque el norteamericano Brent Lillibridge también podría desempeñarse ahí y Ramírez regresar al segundo cojín. El mentor Ozzie Guillén piensa utilizar al cubano como segundo o séptimo bate.

Para el torneo que arrancará este domingo 5 y no se detendrá hasta el 30 de septiembre, el alto mando de Marineros de Seattle aspira a que Yunieski Betancourt, ya en su cuarta justa, pueda batear detrás del primer bate. Para ello, han trabajado con él durante el entrenamiento de primavera, para que sea más paciente en el home. El muchacho de Villa Clara acostumbra a irse con el primer o segundo lanzamientos, y se necesita que pueda conectar con un conteo mayor, en espera de mejores envíos.

Kendry y Escobar

Al parecer, llegó la hora en que Kendry Morales pueda ser el inicialista oficial de los Angelinos de los Angeles. Ahora mismo, en la Liga del Cactus, compiló 397 de average, el más elevado de su novena. Pero Morales tendrá muchos ojos que le observen, sobre todo los de su exigente manager Mike Scioscia. Porque sustituir a Mark Teixeira, que el año pasado consiguió 33 jonrones y remolcó 121 carreras con Atlanta y Angelinos, no será nada fácil. Los Angelinos aspiran a ser punteros en la División Central de La Liga Americana.

En la Nacional, el representante estelar en el cuadro es el capitalino Yunel Escobar, que por tercera vez estará en el campo corto de los Bravos de Atlanta, donde aspira a mantener o mejorar sus promedios de 2007 y 2008.

De regreso al joven circuito, Bryan Peña estará como tercer receptor del Kansas City. Este habanero no llegó a las contiendas cubanas de mayores porque abandonó el país cuando era juvenil. Estuvo en tres campañas con el Atlanta y su destaque en la Liga Invernal de República Dominicana seguramente le ha servido de mucho para mejorar a la defensa y en el bateo.

Dos lanzadores antes lesionados y que ahora aspiran a reencontrar su forma son los vueltabajeros José Contreras y Danys Báez. Contreras, que fue operado en septiembre pasado de una seria lesión en el talón de Aquiles, se disputa un puesto de abridor en los Medias Blancas con el dominicano Bartolo Colón.

Báez, otro de los que pasó por el salón quirúrgico, quiso en la ronda preparatoria ser abridor con Orioles de Baltimore, pero no le fue bien y fue asignado al bullpen. En campañas anteriores fue un buen cerrador; ahora buscará su forma deportiva óptima, ya que tiene condiciones y juventud para seguir en el Big Show.

Viciedo, a las Menores

Dayán Viciedo, otro villareño que llegó hace muy poco tiempo con mucho bombo y platillo a los White Sox, fue enviado al equipo Birmingham Barons, de clasificación Doble A, para que se pula poco a poco.

Tiempo tendrá, porque es extremadamente joven y tenía de rival en la esquina caliente a Josh Fields, que bateó en la primavera 24 hits en 53 turnos, y a Wilson Betemit, que también juega la primera base con desempeño mejor en el entrenamiento. Viciedo se quedó con 6 imparables en 26 veces al bate.

Liván Hernández, incorporado hace poco a los Mets de New York, se ha mostrado bastante bien en la preparatoria, asegurándose así el quinto puesto en la rotación de los neoyorquinos.

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