Actualizado: 28/03/2024 20:04
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Naciones Unidas

La Habana en su caracola

¿Aceptará el nuevo Consejo de Derechos Humanos a países que no han ratificado las convenciones internacionales en esta materia?

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Primero, propuso a los jefes de Estado y de Gobierno que, ante la disminución de la credibilidad y el profesionalismo de la Comisión de Derechos Humanos, los Estados miembros deberían acordar reemplazar la Comisión por un Consejo de Derechos Humanos de carácter permanente, jerarquía superior y composición más reducida.

De acuerdo con la propuesta, los miembros del Consejo serían elegidos directamente por la Asamblea General por el voto de una mayoría de dos tercios de los miembros presentes y votantes. Los miembros del Consejo deberían comprometerse a acatar las normas de derechos humanos más rigurosas.

Asimismo, Annan llamó la atención hacia el insuficiente financiamiento de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, y subrayó que aunque esta tenía un papel cada vez más amplio que desempeñar en las respuestas a las crisis de derechos humanos, seguía estando mal equipada. Según Annan, el compromiso de defender los derechos humanos proclamados por los Estados miembros debería verse reflejado "en la dotación de recursos que permitan fortalecer la capacidad de la Oficina para ejercer su mandato".

La Habana: 'no al aumento de presupuesto'

En junio de 2005, el entonces presidente de la Asamblea General, el canciller de Gabón, Jean Ping, presentó un proyecto de documento elaborado a partir de las propuestas de Annan, que fue alcanzado tras un intenso proceso de consultas y negociaciones con las delegaciones de los Estados miembros. Posteriormente se entregaron copias del documento a cada delegación para que fuera sometido a consulta con sus respectivas capitales.

El 13 de septiembre de 2005, la Asamblea General adoptó un proyecto de resolución titulado "Proyecto de documento final de la Reunión Plenaria de Alto Nivel de la Asamblea General de septiembre de 2005", que sirvió de base para la Cumbre Mundial 2005. En la referida sesión, la última del período de sesiones número 59 de la Asamblea General, el viceministro de Relaciones Exteriores cubano, Abelardo Moreno, se manifestó contrario al aumento del presupuesto de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos:

"Adicionalmente, desearíamos reservar nuestra posición sobre determinados aspectos incluidos en el documento que, a juicio de mi delegación, no responden ni a los intereses de la mayoría de los Estados miembros de esta Organización, ni tampoco a los de mi país. Entre ellos se encuentra el párrafo 124, en particular la formulación que solicita duplicar los recursos asignados a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, formulación que contradice la escasez de recursos de la que tanto se ha hablado en este proceso y que privilegia a un determinado sector en detrimento de otros, para los cuales se dice que no hay ni presupuesto ni dinero".

Para disgusto de la delegación cubana, tres días después los Estados miembros de la ONU adoptaron el Documento Final de la Cumbre Mundial 2005, que refrendaba la decisión de duplicar los recursos del presupuesto de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos para los próximos cinco años, y de establecer el Consejo de Derechos Humanos.