Actualizado: 18/04/2024 23:36
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De la radio 'de interés cubano' en Miami

¿Se ha convertido el llamado 'cuarto poder' en un poder sin control?

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Lo primero que hay que significar es que un tema como este siempre aplaza consideraciones y hechos esenciales. Me excuso entonces por el necesario "reduccionismo" que exige la velocidad de un medio electrónico como Encuentro en la Red.

Aquí se obvian, por ejemplo, algunos tópicos generales como la definición de la misma frase "interés cubano", y el del asunto de "Miami" como frontera cultural con sentido propio. Por demás, no voy a referir la radio que transmite por amplitud modulada (AM), con notable audiencia y programación de 24 horas diarias.

Incluso presento solamente tres programas matutinos que funcionan sincrónicamente por frecuencia modulada (FM), en el horario de 6:00 a.m. a 10:00 a.m., de lunes a viernes, en idioma español, disputándose un público de perfil bastante homogéneo (aunque con matices, claro está) y que de hecho los rota en sus preferencias.

Lo primero que llama la atención es el propio hecho de que tales programas existan, compartiendo el extenso horario de "revistas culturales" y sobreviviendo a la competencia que ellos mismos se hacen. Este es, sin dudas, un dato que avala la significación cultural y política del fenómeno.

Público asegurado

La importancia de la radio de Miami obedece a un grupo de razones:

1) Las largas horas de transportación automovilística a que obliga el modo de vida de esta ciudad (y su planteamiento urbanístico y arquitectónico), que suelen aligerarse sintonizando programas radiales en la carretera.

2) El hecho de que la radio no requiere atención visual, lo que permite que pueda funcionar como elemento ambiental mientras se realizan otros trabajos.

3) La pobre calidad de la televisión de Miami, que la discapacita como alternativa. Esto no sólo se refiere a los programas con factura local, sino incluso a los que son adquiridos. Abarca también los comerciales y anuncios de pobre imaginación, perjudicados además por el ego desbordado de unos propietarios que quieren ser ellos mismos los actores de los anuncios.

4) Las emisoras de Miami dan la posibilidad de que los oyentes "hagan radio", participación que aumenta razonablemente el interés de los oyentes.

5) La creencia (justificada en muchos casos) de que en la radio "ocurren cosas de verdad", que hay génesis de realidad e incidencia en el tratamiento efectivo de los problemas de la comunidad.

6) Tradición, y a esta altura, costumbre. Incluso podemos decir que "identidad".


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