AFP/ Brasilia. La Orden de Abogados de Brasil (OAB) pedirá al gobierno cubano garantías de "integridad física y tratamiento digno" de los boxeadores cubanos que se fugaron durante los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro, en julio, y fueron repatriados a La Habana el domingo, informó el martes el presidente de la entidad, Cezar Britto.

La decisión fue tomada por el Consejo Nacional de la OAB, que pedirá esas garantías al embajador de Cuba en Brasil, Pedro Núñez Mosquera.

La OAB no descarta enviar un representante a la Isla para verificar la situación de los dos boxeadores, y pedirá al gremio de abogados cubanos que hagan un seguimiento, aunque esas pretensiones no tienen grandes posibilidades de éxito, ya que en Cuba no existe independencia del poder judicial.

El presidente de los abogados brasileños explicó que, a pedido de La Habana participará como observador el día 20, en Atlanta (Estados Unidos), de un proceso por los cinco cubanos detenidos en Miami en 1998 y condenados por espionaje.

"Así como reclamamos un tratamiento digno en el proceso de los cubanos detenidos en Estados Unidos, vamos a reclamarle al embajador un tratamiento en las mismas condiciones a los atletas deportados a Cuba", dijo Britto.

Varios miembros del Consejo Nacional de la OAB criticaron la prisa con la que el gobierno brasileño repatrió a los dos boxeadores, localizados la noche del jueves y con un visado de 90 días vigente, según una nota de la OAB.

"La deportación sólo se aplica cuando el plazo de visado expira", dijo al diario O Globo del martes el procurador regional de la República, Artur Gueiros.

Aunque estimó que no existe objeción al retorno de los cubanos si éstos lo deseaban, consideró que hubiera sido apropiado permitir un contacto de los púgiles con instituciones independientes o de apoyo a refugiados: "tenía que saberse lo que había atrás de su deseo de retorno ¿Presión a parientes en Cuba?", cuestionó.

Guillermo Rigondeaux, bicampeón olímpico en 54 kilos, y Erislandy Lara, campeón mundial en 69 kilos, abandonaron la delegación cubana en los Juegos Panamericanos el 22 de julio. Localizados por la policía el jueves por la noche sin pasaportes, fueron repatriados el domingo, según la policía, porque querían volver.

El Senado brasileño amenaza con pedir una investigación. "Me gustaría haber visto una entrevista de ambos (atletas) con total libertad con la prensa brasileña. Me extrañó que no hubiesen dado declaraciones. Creo que esto debe ser objeto de un mayor esclarecimiento", cuestionó el senador del gobernante Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), Eduardo Suplicy, reconocido defensor de los derechos humanos.

El mayor partido de la derecha, Demócratas (oposición), emitió una nota de "indignación".

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