Tres hombres son acusados de contrabando de emigrantes por incidente en el que murió una cubana
Familiares de los acusados y miembros del grupo que transportaban afirman que los supuestos contrabandistas trataban de ayudar a los emigrantes tras hallarlos en una balsa.
Tres hombres fueron acusados este lunes de conspiración para contrabando de emigrantes, por una operación en la que murió una cubana cuando la lancha rápida en que viajaba fue interceptada por la Guardia Costera de Estados Unidos, informó EFE.
Heinrich Castillo Díaz, Rolando González Delgado y Yamil González Rodríguez comparecieron ante un tribunal de Cayo Hueso, en el sur de Florida.
En la vista, la jueza encargada del caso, Lurana Snow, ordenó no repatriar a la treintena de cubanos que viajaban en la lancha, hasta que los acusados tengan representación legal.
Snow fijó una audiencia para el próximo jueves para tratar la situación de la defensa de los acusados y, al día siguiente, efectuará una vista para decidir sobre libertad bajo fianza, según informó la Fiscalía Federal del distrito sur de Florida.
En una declaración jurada de Craig Karch, un agente de Inmigración y Aduanas, divulgada por la Fiscalía, se señala que González Delgado y Castillo Díaz estaban al frente del tablero de mandos del barco y parecían estar operando la lancha rápida cuando ésta fue interceptada en las agitadas aguas del Estrecho de la Florida.
La embarcación trasladaba a 34 personas, incluyendo a Amay Machado González, la mujer que falleció.
De acuerdo con el documento, los guardacostas ordenaron detener la lancha, pero sus tripulantes hicieron caso omiso y se generó una persecución de aproximadamente 45 minutos.
Los agentes efectuaron dos disparos al motor de la nave de los emigrantes y, finalmente, la embarcación se detuvo 6,4 kilómetros al sur de Boca Chica, en el sur de Florida.
Yelal Soto, esposa de Castillo Díaz, dijo en una conferencia de prensa que su esposo había tratado de ayudar a los inmigrantes tras hallarlos en una balsa, cuando se encontraba de pesca. "Ahora lo están acusando de contrabando de personas", declaró.
La versión fue respaldada por Juliet Escandon, una embarazada de cinco meses miembro del grupo de emigrantes, quien fue llevada a territorio continental de Estados Unidos para comprobar si el bebé había sufrido daños.
Escandon aseguró que los cubanos estuvieron el sábado varias horas a la deriva en una balsa. También declaró que los acusados trataron de detener la lancha cuando se acercaron los guardacostas.
"El hombre del bote dijo que teníamos que parar porque los guardacostas estaban gritando que nos iban a matar. Pero nosotros les pedimos que siguieran porque la libertad estaba frente a nosotros", comentó Escandon, quien fue liberada el domingo.
Amay Machado González, la víctima fatal de la travesía, sufrió "un golpe traumático" en su cuerpo, informaron este lunes los guardacostas.
"No hay evidencias (en la autopsia preliminar) de penetración de bala en su cuerpo", dijo a EFE un portavoz de la Guardia Costera. "El caso permanece bajo investigación".
El informe de la autopsia preliminar indica que Machado González murió como consecuencia de un politraumatismo, con heridas en brazos, piernas y espalda.
Machado González se hallaba apretujada en el pequeño bote y fue zarandeada por el impacto violento de la nave contra las aguas, de acuerdo con las autoridades. La mujer se mantuvo inconsciente durante el traslado a un hospital cercano, donde a su llegada se certificó su defunción.
Otros tres ocupantes de la embarcación interceptada sufrieron heridas leves y fueron atendidos a bordo del barco patrulla.
"No había medio posible de que esta gente pudiese ayudarse unos a otros ante el impacto de la embarcación contra las aguas", dijo la Guardia Costera en un informe.
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