Pepe Rivero Big Band/Quartet: tributo a Thelonious Monk

El Clazz Continental Latin Jazz México 2014 que sesionó del jueves 20 al domingo 23 de febrero pasado en el Teatro Julio Castillo de la capital mexicana propició el encuentro del público con figuras significativas del género: el pianista dominicano Michel Camilo, la vocalista mexicana Magos Herrera, el ensamble cubanomexicano AcostaDOS, la pianista española Ariadna Castellanos, el saxofonista cubano Paquito D’Rivera, el noneto Chucho López & Jazztecas, Conga Kings (Feat. Giovanni Hidalgo) y el pianista cubano Pepe Rivero con su cuarteto.

Cuatro jornadas de atractivo Latin Jazz que alcanzaron momentos extraordinarios (Big Band de instrumentistas mexicanos bajo batuta de D’Rivera; Ariadna Castellanos en rondas flamencas; AcostaDOS en muestrario de música popular cubana traspuesto a los espacios del jazz; profesionalismo de Jazztecas; sensualidad vocal de Magos Herrera; virtuosismo de Camilo...) y concluyentes conciertos de Pepe Rivero’s Touch of Clazz (Reiner Elizalde “El Negrón”, contrabajo; Georvis Pico, batería; Manuel Machado, trompeta; Yuvisney Aguilar, percusión afrocubana; Pepe Rivero, piano) y Conga Kings.

El disco doble que hoy nos ocupa, es el trabajo más reciente de Pepe Rivero: CD1/Monk And The Cuban Rumba. Pepe Rivero Big Band. CD2/Homage To MonkPepe Rivero Quartet. El compositor/arreglista, originario de Manzanillo —radicado en Madrid, España—, rinde tributo al pianista emblemático, pionero del bebop: Thelonious Monk (1917 - 1982). Big Band —jazzistas cubanos y españoles—, que ejecuta temas ineludibles rubricados por el “Gran sacerdote” del Minton’s Playhouse de Harlem en los años 40 (“Evidence”, “Ruby My Dear”, “Nutty”, “Off Minor”, “Green Chimneys”), “Remember” (Rivero) y “Gandinga, Mondongo And Epistrofy Whit Sandunga” (fusión de armonías de Monk con proporciones melódicas-rítmicas del pianista Frank Emilio desde sagaz arreglo de Rivero).

Sonoridad de concordias Monktuneras en la mejor tradición del jazz afrocubano/cubop/Latin (Chano Pozo, Gilliespie, Mario Bauzá, Machito, Puentes, Chico O’Farrill, Bebo Valdés, Paquito D’Rivera...). Inicio con “Evidence” y culminación con “Gandinga, Mondongo And Epistrofy With Sandunga”: recomposición que amalgama, precisamente, una de las texturas de Frank Emilio Flynn (1921 - 2001) más monkiana del jazz afrocubano: “Gandinga, Mondongo y Sandunga” —escúchese la magistral ejecución que hacen Orlando Valle Maraca, flauta; Changuito, paila; Miguel Angá, tumbadora/bongó; Enrique Lazaga, güiro y Frank Emilio, piano en Barbarísimo (Milan Music, 1996)— con “Epistrofy”, estándar muy característico del talante Monk.

Rivero desdeña el claro influjo de “Evidence” sobre “Gandinga, Mondongo y Sandunga” y se aventura por otros índices melódicos-rítmicos muy semejantes y concordantes, por cierto, con “Misterioso” y “Criss Cross”(dos piezas cardinales del repertorio del carismático fundador del bebop junto con Parker y Gilliespie). El compositor de “Cha Cha Son” explota con imaginación la euritmia, el esquema percutivo, las notas escindidas y los profusos clústeres de la pronunciación monkiana. Una de las mejores conjunciones la logra en “Green Chimneys” (pieza del LP Underground de 1968 con Charlie Rouse en el sax tenor. El guitarrista Andy Summer tiene una versión en su más reciente CD, sencillamente, espléndida). Piano, trombones, trompetas, saxos (altos y tenores), flauta, contrabajo, güiro, batería y la irrupción de Paquito D’Rivera (clarinete) configuran los minutos angulares de este fonograma: mambo-cha/son-timba de costura Gillespie/O’Farrill/Bauzá excepcional.

“Remember”: Rivero se sumerge en las escolleras de Monk en el dibujo de un bolero de sigilosa belleza. El solo evansiano de lenitivo trazo pone de manifiesto su inquieta imaginería armónica y aleatoria técnica en la improvisación.

En Homage To Monk, el creador de uno de los fonogramas más hermosos del jazz cubano contemporáneo, Los Boleros de Chopin (Universal Music, 2010), opta por un formato reducido a piano, trompeta, sax tenor, contrabajo, percusión (tambores batá), batería y voces: siete composiciones que transitan por lo folclórico (“Kila Kila”, Rivero), “Blue Monk” (Rivero/Monk), “Diego My Love” (Rivero) y la subjetiva “Suite Family: I, II, III, IV” (Rivero).

Si el trompetista neoyorquino Jerry González en Rumba para Monk (2001), acentúa la presencia de los elementos de la rumba afrocubana (yambú, columbia, guaguancó, palo...) en las concordias de las composiciones del pianista bebopero, y el panameño Danilo Pérez en PanaMonk (2010) ilustra el disonante/acompasado/percutivo (desfases asimétricos, breves pausas) estilo del autor de “Round About Midnight”, al cubano le interesa rehacer, reconfigurar, el cosmos monkiano en los plazas de la tradición pianística cubana.

Se aprecian los influjos de Ernesto Lecuona y Antonio María Romeu en diálogo con el tumbao montunero de Lilí Martínez y Peruchín Justiz. Apropiación muy personal de algunos gestos de Chucho Valdés/Rubalcaba. Rivero es uno de los grandes herederos de la escuela pianistica cubana, cuyas raíces se encuentran en Cervantes y Saumell. Arreglos afines con el universo del controvertido jazzista de Carolina del Norte. El compositor de “Chopin on my Mind” en el mejor momento de su carrera como instrumentista, compositor, arreglista y director.

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