Rivales de lujo

Hace un par de semanas, Cuba y Estados Unidos eran los pretendientes lógicos para disputarse la medalla de oro del béisbol en la cita de Pekín. Pero a sólo horas de que se dé la voz de playball y tras conocer los integrantes de los demás competidores, Japón despunta como el máximo candidato a llevarse el codiciado título, con una escuadra repleta de jugadores estrellas.

El elenco nipón, monarca del Primer Clásico Mundial de 2006, agrupa un sólido staff de 11 lanzadores de sus Ligas Central y del Pacífico, los dos líderes de bateo de 2007, y de sus 24 miembros, siete participaron en el Clásico.

Senichi Hoshino, que ganó 146 juegos y perdió 121 como tirador rentado durante 14 temporadas y fue varias veces mentor en su país, es el coach principal del equipo, donde sobresale Yu Darvish, puntero actual en la Liga del Pacífico, con 2.07 y 11 victorias y 4 derrotas, y quien el año pasado trabajó para 1.82, con 15 y 5 y 210 ponches en 208 episodios. A Darvish se une Yoshihisa Naruse, champion pitcher en 2007, con 16 éxitos y un revés, y un formidable 1.82 de efectividad y 3.16-6-6 en la campaña actual.

El equipo también cuenta con Kenshin Kawakami (7-52 y 2.54), Toshiya Sugiuchi (15-6-2.46), Masahiro Tanaka (196 ponches en 186 entradas) e Hideaki Wakui (17-10 y 2.79).

Los jardineros Norichika Aoki (346) y Atsunori Inaba (334) fueron los mejores bateadores del año pasado, acompañados por los jonroneros Takahiko G.G. Sato y Masahiko Morino. Entre los tres catchers, aparece Tomoya Satozaki, que fue el titular en la contienda mundial.

El cuadro está fuertemente custodiado por el short stop Shinya Miyamoto; el segunda base Takahino Arai, un potente cañonero de 28 cuadrangulares y 102 impulsadas; Tsuyoshi Nishioka (160 hits y 27 robos); y Hiroyuki Nakajima, quien disparó la misma cantidad de imparables que Nishioka en 2007.

Del colectivo rey de 2006 falta su astro, Daisuke Matsuzaka, ganador del juego decisivo ante Cuba y que viste por segundo año el traje de los Medias Rojas de Boston en Grandes Ligas.

Cuba, con su mejor equipo

Cuba defenderá seguramente su preciado galardón de Atenas-2004, con una alineación que comenzará con Giorvis Duvergel (cf), Michel Enríquez (tercera base), Yulieski Gourriel (2b), Alexander Mayeta (1b), Frederich Cepeda (lf), Alexei Bell (rf), Alfredo Despaigne o Rolando Meriño (designado), Ariel Pestano (c) y Eduardo Paret (short stop).

Los experimentados Pedro Luis Lazo, Norge Luis Vera, Adiel Palma y Vicyohandry Odelín tendrán la mayor responsabilidad en el grupo de serpentineros. La única ausencia en la escuadra nacional, con relación a la novena que ganó el subcampeonato en el Clásico de 2006, es Alexei Ramírez —noveno bate—, que alternaba en los jardines y el cuadro y ahora juega en Grandes Ligas.

Cuba atesora la mayor cantidad de trofeos dorados en eventos beisboleros de magnitud y su fuerza se mantiene inalterable. El conjunto, que estrena mánager con Antonio Pacheco, ha sufrido algunos descalabros en los últimos tiempos, pero se debe fundamentalmente a la entrada libre de jugadores profesionales en los torneos y a una mejor preparación de sus oponentes.

Aunque algunos consideren que las evasiones de peloteros hacia el béisbol de Estados Unidos ha mermado la calidad de la selección nacional, lo cierto es que, con la excepción del citado Ramírez, ninguno de los restantes tenía las credenciales necesarias para suplir al grupo que ahora se encuentra en China.

EE UU quiere repetir

Estados Unidos se hará representar por jugadores de calidad de Triple y Doble A, que, de la mano del sagaz Davey Johnson, han realizado un training esmerado para esta oportunidad.

Una propuesta de alineación de EE UU sería a base de Dexter Fowler (cf), Brian Barden (2b), Terry Tiffee (1b), Mike Hessman (3b), Nate Schierholtz (rf), John Gall (designado), Matt LaPorta (lf), Taylor Teagarden o Lou Marson (c) y Jason Donald (ss).

El alto mando norteamericano encabezó su roster con un sólido cuerpo de serpentineros que lideran los abridores Brett Anderson (zurdo), Trevor Cahill (derecho), Brandon Knight (zurdo) y Jake Arrieta (derecho), al que se unen los cerradores Jeff Stevens (d), Mike Koplove (z) y Blaine Neal (d). Los relevistas son Kevin Jepsen, Brian Duensing, Jeremy Cummings, Stephen Strasburg y Casey Weathers.

De acuerdo con el calendario, Cuba debutará este miércoles 13 de agosto frente a Japón, el jueves 14 ante Canadá, el viernes 15 con Estados Unidos y el sábado 16 frente a Taipei de China, en un inicio extremadamente difícil y que mucho tendrá que ver con los resultados de la fase clasificatoria, que se jugará por el sistema de uno contra todos. Los cuatro de mejores resultados entre los ocho contendores pasarán a la ronda de "rompecorazones".

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