Actualizado: 25/04/2024 19:17
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Política

«La Iglesia polaca apoyó las aspiraciones de libertad»

La entrevista que Lech Walesa concedió a 'Vitral', pero que no pudo ser publicada en el último número de la revista.

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El famoso escritor y reportero polaco Ryszard Kapuscinski, en su reportaje escrito desde el astillero de Gdansk en el año 1980, escribió sobre la huelga de ustedes: "Quien trata de reducir el movimiento de la Costa sólo a los asuntos salariales o al mejoramiento de la situación material, no entendió absolutamente nada. El motivo principal de la huelga de los obreros fue la dignidad del ser humano". En cambio, el general Wojciech Jaruzelski, en la entrevista para Vitral publicada en agosto del año pasado dijo: "21 puntos proclamados por Solidaridad se resumían así: nosotros trabajaremos menos y ganaremos más". ¿Está usted de acuerdo con la opinión del general Jaruzelski?

Encuentro de Walesa con el Papa Juan Pablo II en el Vaticano, en 1980Foto

Encuentro de Walesa con el Papa Juan Pablo II en el Vaticano, en 1980. (E. CIOLEK)

Los políticos, los revolucionarios, tienen que recordar una cosa: que igual que los entrenadores deportivos, no pueden comenzar sus entrenamientos por las mayores cargas. Si lo hacen de esta forma, sólo van a desanimar a sus entrenados. Por eso las cargas y tareas, igual que las demandas, hay que ubicarlas en la situación de contexto. Por supuesto que nosotros, al comenzar la huelga, reclamamos la reintegración al trabajo de la activista Anna Walentynowicz y el aumento de los salarios. ¿Qué íbamos a reclamar, sindicatos independientes y el derrocamiento de la Unión Soviética? ¡Bromas aparte!

Por eso, cuando todo se refuerza, cuando se logran las victorias pequeñas, entonces hay que incrementar la carga. Añadir un peso pequeño, grande, y más grande al final. Aquí todo depende de los entrenadores, de los líderes revolucionarios: si lo hacen bien, de forma gradual, ganan; si sacan demasiado peso desde el inicio, pierden.

Nosotros sabíamos muy bien que el enemigo era muy difícil, por eso tratamos de graduar el peso, para poder ganar al final. Entonces, si el general Jaruzelski dijo que los 21 postulados que proclamamos durante la huelga tenían un componente salarial fuerte, no estaba mintiendo, sólo que se refería a la primera fase.

En la primera fase de la huelga las gentes tenían que sentir que ganarían más. Después, cuando lo hablamos entre nosotros, empezamos a incrementar el peso de nuestros reclamos. Quisimos hacer esos 21 postulados de tal forma que captaran la atención del mayor número de personas y, al mismo tiempo, evitar las situaciones y los errores que cometimos diez años antes, cuando nuestra lista de demandas tenía 2.000 o 1.800 puntos.

Entonces las autoridades nos decían: "compañeros, ya cumplimos 1.500 demandas, sólo quedan 100 que no podemos cumplir". ¿Y qué? Nada, porque esas 100 que no cumplían eran las más importantes para nosotros. Por eso, teniendo esa experiencia en la memoria, hicimos todo para reducir el número de nuestras demandas. Así pudimos vigilar la realización de las mismas, y a la vez atraer a más gente. Esta es la técnica de la lucha revolucionaria. Por eso no entiendo por qué el general Jaruzelski no mencionó la segunda fase de nuestra lucha. ¿Por qué si sólo queríamos "trabajar menos y ganar más" fuimos más adelante, y al final contribuimos al derrocamiento de la Unión Soviética?

31 de agosto de 1980. El acuerdo firmado entre el Comité Inter-Empresarial de Huelga y la Comisión Gubernamental pone fin a la huelga y permite la creación de Sindicatos Independientes y Autogestionarios "Solidaridad". ¿Cómo es que, sólo seis meses después, ustedes contaron con 10 millones de miembros?

Sucedió porque los 21 postulados del Comité Inter-Empresarial de Huelga en Gdansk dejaban ver el interés por ellos a los 10 millones de miembros. Estos diez millones de personas se identificaron con nuestros postulados y con nuestra lucha. La gente se incorporaban a Solidaridad porque veía la esperanza y el potencial de satisfacer sus aspiraciones. Las personas que se incorporaron a nuestros sindicatos podían clasificarse en personas que veían sólo el interés material, otros que veían en ello interés político y quienes veían intereses diferentes.

¿Qué significa eso? Que como los entrenadores, los líderes revolucionarios, encontramos la propia carga de trabajo y la propia estrategia. Lo planificamos todo de tal forma que nada se derrumbó; al revés, tuvo la fuerza de atraer masas.

Muy bien, pero, ¿de dónde salen los entrenadores revolucionarios, como usted les llama?

Aquí las repuestas pueden ser diferentes. Normalmente, en cada grupo, en cada círculo de personas, después de unos cinco o diez años crecen los líderes informales. Si trabajas junto a un grupo de personas de forma natural durante un tiempo, crecen autoridades. Cuando ellos dicen algo, los demás lo hacen. Cuando ellos se niegan a hacer algo, los demás también se niegan. Así nacen los líderes informales. En los años ochenta, los líderes naturales derivaron de las personas que resistían la dominación comunista, o los que eran más honestos que los demás. Ellos tenían esa "autoridad no escrita", y nosotros pudimos contar con esa gente, e incorporarles a nuestra lucha.

El llamado "Carnaval de la Solidaridad" duró 14 meses. Solidaridad contó con más miembros que el propio Partido Comunista. El día 13 de diciembre de 1981, el general Jaruzelski declaró el Estado de guerra, no previsto en la Constitución, en todo el territorio nacional de Polonia. ¿Por qué las autoridades violaron el acuerdo firmado en el astillero de Gdansk?

Voy a explicarlo de una forma muy simple. En aquel tiempo, el sistema comunista trabajó como un mecanismo de ruedas dentadas, donde todas las ruedas giraban hacia la misma dirección, a la izquierda. Entonces, Solidaridad añadió a este mecanismo una rueda dentada pequeña, que giraba hacia otra dirección, a la derecha. Así, la única solución era: o la rueda pequeña va a destruir todo el mecanismo, o el mecanismo va a destruir a la rueda pequeña. La Ley Marcial fue un intento de destruir la rueda pequeña.