El placer de ser coach
Westchester Optimist Orange
Primera fila entrenadores: De izquierda a derecha Fernando Vilá, David Orozco, Alvaro Cañarte, Alex González, Arnel Alonso.
Parados: Fernando Vilá Jr., Sebastián García, Michael Ruiz, Brandon González, Justyn Rubio.
Sentados: Alejandro Alonso, Alvaro Cañarte Jr., Sebastián Orozco, Ryan Quesada, Frans Alvarez.
El placer de ser coach
Quiero tomarme un tiempo para hablar de algo que casi siempre pasa desapercibido en la prensa, pero que a mi juicio es muy importante y no es más que el deporte infantil.
Da gusto ver y disfrutar como se desarrollan los niños dentro de un deporte como el béisbol. La gran atrapada, el gran batazo conectado o el buen corrido por las bases ponen orgulloso a más de uno y esto, en particular, es lo que he sentido entrenando a la mayoría de estos muchachos por espacio de más de dos años. A cualquier edad es importante, pero con muchachitos de entre cinco y siete años lo es más todavía. Estos niños sin duda alguna, pueden ser los peloteros del futuro. Cuando tengan la edad suficiente pueden llegar a destacarse en las escuelas, equipos juveniles, universidades y quién sabe si en el sorteo del béisbol colegial y en el profesionalismo. Uno nunca sabe hasta dónde pueden llegar. Todo depende de ellos, de los padres y de que la suerte les acompañe.
La mayoría de ellos ya llevan varias temporadas jugando juntos, algunos ya tienen experiencia de dos años y más de cinco temporadas. Comenzaron jugando en la categoría semillitas para niños de tres años, pasaron a T-Ball y ahora se encuentran en la modalidad de Coach Pitch.
En el equipo hay talento de sobra en varios muchachos, algunos defienden muy bien, otros tienen poder al bate o tacto para conectar la pelota lanzada por el coach. Es increíble cómo, a esta temprana edad, adquieren la habilidad necesaria para conectar una pelota que se vaya de home run o atrapar un fly de aire.
Alvaro, Sebastián O., Fernando, Justyn, Alex, Brandon, Frank, Michael, Sebastián G., y Ryan conforman este equipo que juega su primera temporada en la categoría de coach pitch.
Todo esto se logra gracias al esfuerzo de todos, empezando por los padres y madres, los entrenadores que invierten tiempo, dedicación y esfuerzo en enseñar a estos pequeñines y por supuesto, es fundamental que los peloteritos lo disfruten, y les guste este deporte, que se sientan parte de formar el equipo.
Si todo esto se une, sin duda que lograremos pulir sus talentos y adquirir habilidades que le servirán en la vida en general. Quiero agradecer a los coaches Alvaro, Arnel, David y Alex quienes práctica tras práctica ponen todo su interés en transmitirles sus conocimientos a estos niños.
Algunos podrán llegar a ser peloteros a algún nivel de importancia, otros se dedicarán a otras actividades, pero la clave en todo esto, es que lo que aprenden en materia de desenvolvimiento, habilidades, disciplina, entre otras ventajas, le ayudarán en todo lo que les vendrá en su vida futura.
