Curiosidades Cubanas ¡Kendry!

De otro que no me canso de escribir es de Kendry Morales. El ex industrialista ayer disparó un par de jonrones ante los envíos de Carl Pavano de los Indios de Cleveland y llegó a 20 en lo que va de campaña. El ritmo de su bate es el que inspiró la sección Curiosidades Cubanas en esta ocasión.

Con estos dos batazos llega a una cifra que ya tiene peso en esta pelota, sobretodo faltando 64 partidos para que finalice la temporada regular.

Calculando que Kendry descanse en algunos de los partidos que restan en este 2009 y entrando en el mundo de los pronósticos le deben quedar unas 200 veces al bate en la campaña. El promedio actual de jonrones por veces al bate es de 16.80, de mantenerlo de esa manera puede pasar los 30 cuadrangulares y meterse en un selecto grupo de peloteros nacidos en Cuba que han sobrepasado esa cantidad en una campaña.

Noten que solo cuatro peloteros cubanos han podido dar más de 25 jonrones en una sola temporada, ellos son; Rafael Palmeiro, José Canseco, Tony Oliva y Tony Pérez. Es casi seguro que Kendry será el quinto en esta reducida lista.

Cada jonrón que dispare el inicialista a partir de ahora hará historia entre los toleteros cubanos, juego a juego debe seguir escalando en esta lista y se va a poner cerca de 30 o quizás más.

Por supuesto que todo esto es especulativo pues el futuro es impredecible, pero el paso que lleva es muy bueno.

Hasta hoy está a uno de Alexei Ramírez que es el cubano que ha jugado en series nacionales con más cuadrangulares en una temporada de Grandes Ligas.

Desde ya esta actuación le vale para consolidarse en este béisbol y poder firmar un buen contrato en un futuro cercano.

¿Llegará Morales a 30 y se unirá a este selecto grupo de cubanos? Pienso que si.

¿Sobrepasará algún día la marca de 47 de Rafael Palmeiro en 1999? Solo el tiempo dirá.

Lista de cubanos con más jonrones por temporada

40 +

30 +

20+

¡Que clase de pelotero es El Duque!

Realmente no me canso de escribir sobre un pelotero como Orlando Hernández.

Ayer el periódico Nuevo Herald publicó la noticia de la firma del derecho con los Marineros de Seattle tras su breve paso por los Rangers de Texas

Estas cosas son dignas de mencionar y analizar. Hace unos días no logró su objetivo con Texas, pero, nada, nada detiene a este ser humano en su objetivo de seguir adelante.

Este pitcher no tiene necesidad de ganar dinero pues según www.baseballreference.com ha ganado alrededor de 35 millones de dólares en 11 temporadas. No está luchando por llegar a ninguna meta estadística que lo eleve al Salón de la Fama o lo coloque alrededor de la inmortalidad puesto que llegó a esta pelota mayor y no va a acumular números espectaculares.

Ni siquiera el incentivo de llegar a las 100 victorias pues tiene 90 y no es probable que pueda llegar al centenario de triunfos en esta campaña, esto en caso que sea abridor con los Marineros, cosa que es improbable.

A este hombre lo motiva el béisbol, solo el béisbol y la competencia al más alto nivel.

Este si es un pelotero de esos que juega por amor a la pelota de verdad. Es un guerrero en toda la extensión de la palabra. El apodo que le pusieron gracias a su padre se lo ha ganado y bien ganado. Toda la incomodidad que significa jugar en las ligas menores pasa a un segundo plano para este pitcher, por tal de tener la oportunidad de volver a lanzar en un estadio de Grandes Ligas.

He leído algunas opiniones donde se dice que ya debería retirarse y dejar paso a los más jóvenes. Bueno, El Duque aunque veterano no está acabado ni mucho menos, sus fracasos han sido debido a las lesiones y no a los bates contrarios.

Dominó en la Triple A en sus actuaciones en días recientes, todavía tiene una recta que marca más de 90 millas. En fin, que el no está regresando por un capricho personal, estando ya acabado. Estoy convencido que si comienzan a batearle con comodidad el se retira.

Hernández necesita la competencia, necesita el béisbol, necesita entrar a un terreno de pelota como quizá muy pocos sienten esa necesidad.

Me quito el sombrero ante este lanzador. Yo tuve la oportunidad de verlo el día de su debut en 1987 en el Estadio Latinoamericano y nadie hubiera pensado ese día que 22 años después todavía Orlando Hernández estaría jugando pelota.

El Duque es un ejemplo para todos, no solo en el béisbol, me refiero a la vida cotidiana, ejemplo de perseverancia, de voluntad, de levantarse después de los fracasos. Pase lo que pase estadísticamente en este nuevo equipo, para mí siempre será un ejemplo a seguir. Y debe ser orgullo para todos los cubanos.

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El Duque retoma el camino a las Mayores

El Nuevo Herald

Por Jorge Ebro

Si Orlando "El Duque'' Hernández no fuera un hombre persistente, jamás habría ganado cuatro anillos de Serie Mundial, ni hubiera sido uno de los mejores lanzadores de todos los tiempos en la pelota cubana.

Esa misma constancia es la que lo tiene hoy de nuevo en una ruta que podría llevarlo de nuevo a las Grandes Ligas.

Lo que el ex pitcher de los Industriales no logró con los Rangers de Texas, pudiera alcanzarlo con los Marineros de Seattle, que le extendieron un pacto de Ligas Menores al veterano serpentinero.

Pero a diferencia del primer equipo, en esta ocasión los Marineros le han prometido a Hernández que tan pronto él se sienta listo para regresar, lo ascenderían de inmediato al conjunto donde brilla el japonés Ichiro Suzuki.

"Ahora estamos más cerca que nunca de volver a las Mayores'', expresó el agente del pelotero, Mike Maulini. "Ellos han sido precisos al aclarar que Orlando subirá al equipo grande cuando él mismo lo decida''.

Hace sólo unos días, los Rangers le habían comunicado a Hernández que no lo contemplaban para utilizarlo de inmediato, pero que más adelante, tal vez, habría alguna oportunidad.

Pero el cubano decidió abandonar esa vía, utilizando una cláusula en el contrato que estipulaba su entera liberación antes del 20 de julio si para esa fecha no vestía un uniforme de las Mayores.

Cuando El Duque firmó un pacto de Ligas Menores con los RedHawks de Oklahoma -un equipo de la Liga del Pacífico- el 16 de junio, Texas no sabía qué esperar de él, pero en el poco tiempo que duró su estancia en el sistema de granja el cubano demostró que todavía podía sacar outs al más alto nivel.

Con los RedHawks, El Duque logró marca de 2-0 con 2.45 de efectividad en 11 entradas de actuación. Sólo le pegaron cuatro indiscutibles, incluido un cuadrangular. Regaló cuatro boletos, pero ponchó a 12 bateadores.

Según Maulini, Texas le hizo saber que sí ascenderían a Hernández, pero no sabían cuándo, debido a que consideraban que aún necesitaba más tiempo en las Menores para declararlo listo.

El propio gerente general de Texas reconoció que El Duque se encontraba en muy buenas condiciones físicas.

"Los reportes que teníamos sobre él eran positivos. La velocidad nunca fue un problema, sólo necesitaba más tiempo'', comentó Daniels. "Con más tiempo e innings, él hubiera estado listo, pero él tenía esa salida en su contrato y la usó''.

Hernández lanzó por última vez en las Mayores en el 2007 con los Mets, cuando tuvo marca de 9-5 con 3.72 de efectividad. Trabajó en las Menores con una sucursal de Nueva York en el 2008.

Los Mets tenían a Hernández como su quinto abridor en la rotación, pero seguidos retrocesos -que le obligaron a cambiar su forma de lanzar- pusieron fin a la rehabilitación durante la primavera y El Duque no se acercó más a un bullpen.

El cubano, que se declaró agente libre al final del 2008, no pudo actuar tampoco en esa campaña con los Mets debido a una intervención quirúrgica en el juanete del pie derecho en agosto que le obligó a permanecer en la lista de inhabilitados.

Incluso, llegó a coquetear con un posible retiro y habló de "darle paso a los más jóvenes'' en varias entrevistas, pero el descanso prolongado combinado con un riguroso plan de ejercicios le devolvieron la ilusión.

Antes de este problema en el pie, Hernández padeció lesiones en el cuello, el brazo y el pie que le impidieron desplegar su talento en los últimos dos años.

Perfect Game

Alexei Ramírez y Michel Hernández hicieron historia hace dos días al participar desde bancos contrarios en el juego perfecto que lanzó el zurdo de los Medias Blancas de Chicago Mark Buehrle.

Repasando la historia de las actuaciones de los peloteros cubanos en este tipo de partidos vemos que lo hecho por Alexei y Michel aunque muy significativo no es la primera vez que sucede. En otras ocasiones dos cubanos han estado en un mismo partido perfecto.

Lo que si es inédito es el último out del juego que sacó Alexei Ramírez en roletazo de Jason Bartlett al campo corto, nunca antes un jugador cubano había sacado el out 27 de un juego de este tipo. Alexei conectó de de 3 x 2 con una impulsada y un boleto.

Sandy Amorós el primero

El primero criollo en participar en un juego perfecto fue el jardinero Sandy Amoros quien patrulló el jardín izquierdo para los Dodgers de Brooklyn el día de 1956 que Don Larsen de los Yankees de Nueva York tiró el primer y único juego de este tipo, hasta el momento, en una Serie Mundial.

Tres en un mismo encuentro

La primera vez que tres cubanos participaron en un partido de este tipo fue en 1968 cuando Oakland venció 4 x 0 a Minnesota. En el bando de los perdedores estuvieron Tony Oliva como cuarto bate y jardín derecho y Jackie Hernández séptimo al bate y torpedero. Ellos, como el resto de los Mellizos no pudieron descifrar los envíos de Catfish Hunter.

En el equipo de Oakland estuvo el matancero Bert Campaneris como primero a la ofensiva y jugando como torpedero. Esta es la única ocasión que tres cubanos han participado en un juego inmaculado.

Dupla ganadora

La primera vez que dos cubanos fueron parte del equipo ganador de un juego perfecto fue en 1964. Ese año Jim Bunning blanqueó 6 x 0 a los Mets de Nueva York y en ese encuentro la combinación short-segunda de los Filis fue cubana. Tony Taylor como camarero y Cookie Rojas en el campocorto.

Primer descendiente

El primer hijo de cubano que estuvo en uno de estos clásicos de pitcheo fue Jorge Orta de los Indios de Cleveland. Jugó el jardín derecho y bateó de 4 x 3 para ayudar a Len Barker dominar a los Azulejos de Toronto 3 x 0 en la temporada de 1981.

En 1994 José Canseco ayudó a Kenny Rogers de los Rangers de Texas a blanquear a California 4 x 0 al conectar de 4 x 2 con dos empujadas y dos anotadas.

En 1998 Jorge Posada se convirtió en el primer receptor con raíces cubanas en recibirle a un lanzador que tira un perfect game al ser el catcher de David Wells en la victoria ante los Mellizos de Minnesota 4 x 0. En el equipo perdedor jugó el jardinero cubano americano Alex Ochoa.

Luis González estuvo en la alineación del equipo de Arizona el día que Randy Johnson lanzó su juego perfecto ante los Bravos de Atlanta en el 2004.

En solo 18 partidos perfectos que se han lanzado en toda la historia, 5 de ellos antes de 1956, miren cuantos cubanos han estado envueltos en este tipo de encuentros.

Esperemos que algún día cercano tengamos a uno de nuestros lanzadores con este honor.

Curiosidades Cubanas

A partir de hoy Palmar de Junco publicará una sección llamada Curiosidades Cubanas, donde se resaltarán hechos significativos acerca de los peloteros cubanos ocurridos a lo largo de la historia.

Básicamente van a ser datos estadísticos, logros, anécdotas, hechos, curiosidades, situaciones relacionadas con el béisbol cubano.

Todo el que haya vivido en la Isla por determinado tiempo, sufrió de una falta de información que no es fácil superarla una vez que se sale al exterior.

Independientemente del tiempo que alguien haya vivido en Cuba, durante ese lapso se perdió la oportunidad de conocer acerca de los peloteros cubanos que jugaban en el exterior.

No todos los fanáticos buscan documentarse de lo que ha sucedido en años anteriores, en muchas ocasiones nombres antiguos son totalmente ajenos, puesto que en algunas ocasiones no se conocen.

Muchos que han salido en años recientes desconocen lo rica que ha sido la historia de nuestra pelota a través de la historia, pues se les negó esa información mientras vivieron en el país.

Esa es la idea de esta sección Curiosidades Cubanas, recordar hechos significativos que han ocurrido en la historia alrededor de la pelota cubana.

Tres cubanos en un grupo selecto

De los más de 17 mil peloteros y dueños que han estado en las Grandes Ligas solo 148 tienen el privilegio de tener los números que usaron en sus carreras, retirados en los diferentes equipos de las dos ligas que componen el Big Show. Debo aclarar que algunos equipos han retirado números a nombre de los dueños.

Entre ese selecto grupo se encuentran tres cubanos, lo que pone muy en alto el nivel de estos jugadores y del nivel de nuestra pelota en las épocas en que desarrollaron sus carreras.

En 1983, los Medias Blancas de Chicago retiraron el número 9 que el estelar Orestes Miñoso utilizó en esa novena. Este fue el tercero retirado por esta organización y a su vez fue el tercer pelotero latino en recibir tal honor detrás de Roberto Clemente y Juan Marichal.

El pinareño Tony Oliva fue testigo el 14 de julio de 1991 de ver su número 6 retirado por la organización de los Mellizos de Minnesota. Fue el tercero retirado en la historia de ese equipo.

Por ultimo, Tony Pérez quien es de estos tres el único miembro del Salón de la Fama de Cooperstown tuvo su honor el 27 de mayo del 2000 cuando su número 24 fue retirado por los Rojos de Cincinnati.

Tres peloteros que abarcaron varias décadas de esplendor en la pelota cubana vieron sus carreras reconocidas a través de este importante gesto de parte de las organizaciones de Grandes Ligas

¿Quien será el próximo cubano en ganar esta distinción?